UGT: la renovación de un sindicato en medio de una crisis sanitaria

Había que dejar paso “a la gente del siglo XXI”. Así se despidió Carlos Pedrosa de un puesto que ocupó durante 17 años y que desde diciembre de 2019 sigue vacío: el de coordinación regional de UGT Castilla-La Mancha. La Ejecutiva que acompañaba al albaceteño dimitió también y, por lo tanto, la organización tenía que volver a estructurarse prácticamente desde cero. Entonces, Pedrosa anunció que sería en noviembre cuando se renovarían los puestos, en menos de un año, pero la crisis sanitaria tenía otros planes.

Amparo Burgueño ha sido la portavoz de la comisión gestora que se ha hecho cargo de la dirección del sindicato durante este año tan convulso. “El congreso se ha retrasado porque, como en tantos otros ámbitos, la pandemia ha marcado la agenda. Pero nos gustaría que fuese un congreso participativo y al nivel de lo que se merece la UGT de Castilla-La Mancha después de todo lo que hemos vivido por la gestora y la pandemia. Por eso hemos decidido buscar otra fecha, para el 10 de marzo”, recalca.

“Renovar los organismos es fundamental”

“La organización tiene muy claro el sentido democrático que hay que darle a todas las actuaciones, nuestros estatutos son democracia articulada y tenemos que seguir el mandato de los estatutos. Renovar los organismos es fundamental, es algo que no podemos saltarnos ni podemos obviar. Lo que sí es cierto, es que tenemos que adaptarlo a la realidad que tenemos, porque para nosotros no hay debate entre salud y economía. Hasta ahora los formatos que se han seguido han sido muy participativos, pero con una sensación de frialdad y también de alegría de poder cumplir los plazos y procedimientos”, relata Burgueño. Además, recuerda que el sindicato tiene plazos para elegir su nueva Ejecutiva, marcados desde un nivel federal.

Hasta ahora, se han celebrado seis congresos en el sindicato. Carmen Campoy fue elegida con todos los votos como secretaria general de la Federación de Servicios Públicos de UGT, el primer congreso tras la fusión de las federaciones de Trabajadores de Enseñanza y de Empleados Públicos. Rosalía Jiménez, fue también reelegida por unanimidad como secretaria general de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT Toledo. Francisco Javier González fue también reelegido por unanimidad como secretario general en Albacete, y Vicente Martínez consiguió el 87,5% de los votos para liderar la organización en Cuenca y Alfonsi Álvarez, el 91% de los votos para hacer lo propio en la provincia de Ciudad Real. Raúl Alguacil fue elegido como el nuevo secretario general de UGT-FICA, reemplazando a Carlos Duque, que encabezaba la federación desde 1991.

Todavía no se ha querido hacer público ningún candidato oficial a ser la cabeza visible de la organización, pero Butragueño asegura que esto es algo “bastante habitual”. “Tanto como que no se conozca de manera oficial ningún nombre, como que se haya planteado ya, como ha ocurrido en Comisiones Obreras”, recalca, pocos días después de que Paco de la Rosa anunciase su intención de presentarse a renovar su cargo como secretario general de CCOO.

El trabajo durante la pandemia

Burgueño reconoce que el trabajo a partir de que se impone el estado de alarma fue duro, pero también muy positivo para el sindicato. La afiliación, sin ir más lejos, ha crecido en alrededor de un 10% durante el último año y también se puso en marcha una nueva modalidad de afiliación digital. “Experimentamos una unión inusitada en la UGT. Nos articulamos en grupos de trabajo más abiertos, en comisiones de seguimiento de todo tipo, mesas y ejes, y también con CCOO, la patronal y el Gobierno”, asegura. “Los sindicatos podemos adaptarnos, por eso no cerramos. La gestora tuvo muy claro que teníamos que seguir trabajando y creo que se desarrollaron inercias de trabajo que se van a mantener y seguir desarrollando”, recalca.

Burgueño recuerda la responsabilidad de la organización, de cara a una situación tan compleja como la que se produjo con la crisis sanitaria. “Era fundamental en la economía de trabajadores y trabajadoras. Somos conscientes de que el anuncio de los ERTE como instrumento se ha valorado en toda Europa y que ha hecho que mantengamos la sensación entre los trabajadores de que hay un vínculo con su puesto de trabajo, a pesar de las dificultades”, explica la sindicalista. En este sentido, recalca que la comisión de seguimiento de los ERTE ha sido uno de los ejes de trabajo “más importantes” que ha tenido la UGT en este sentido.

“Además de estar muy pendientes, negociar y discutir con el Gobierno, al anunciarse paquetes de medidas que son absolutamente necesarias. Es fundamental abordar la posibilidad de la reforma laboral y el debate de la subida del Sueldo Mínimo Interprofesional, sobre todo en el caso de ver aumentar el paro”, recalca. La organización sindical ha trabajado “en dos velocidades”. Por un lado, en el día a día con la velocidad que ha marcado la pandemia, y por el otro, con la “evolución natural” que supone buscar el camino, el proyecto y las personas. “Hemos querido construir un proyecto alrededor del sindicalismo de base”, afirma.

Por eso, concluye que el Congreso regional y el nuevo equipo renovado ofrecerá un “antes y un después” con “muchísima ilusión”, pero también dispuestos a contestar todas las preguntas relacionadas con la gestión de la comisión gestora. “La pandemia nos ha traído la posibilidad de empezar de una manera diferente”, concluye Burgueño.