Los alumnos de infantil y primaria de Castilla y León volverán a las aulas este miércoles, 9 de noviembre, en un arranque de curso marcado por la pandemia de coronavirus y con un incremento tanto de alumnos como de personal docente, donde se registra un incremento de efectivos de más de 1.105. De los cuales, 845 corresponden a la enseñanza pública y 260 a la concertada. Este millar -casi diez veces más que las incorporaciones del curso anterior- responde al aumento derivado del incremento de alumnos, así como de los más de 800 refuerzos para cumplir con las medidas de seguridad impuestas por la pandemia.
Así lo ha detallado la consejera de Educación, Rocío Lucas, durante la presentación del nuevo curso, en el que ha repasado las medidas de seguridad anunciadas en las semanas precedentes para garantizar la vuelta “segura” a las aulas y ha desglosado las cifras educativas para el periodo 2020-2021.
Este curso contará con 347.575 alumnos estimados -el plazo de matriculación para Bachillerato y FP aún no está cerrado- en enseñanza de régimen general, frente a los 346.952 del curso anterior, un 0,18 por ciento más, y 28.051 de régimen especial -20.680 en idiomas y 7.371 en enseñanzas artísticas-, por encima de los 27.940 del curso 2019-2020.
En el régimen general, destaca el incremento de alumnado en FP, del 2,09 por ciento (872 alumnos más), mientras que en Bachillerato el aumento estimado será del 0,55 y el resto de etapas educativas presenta ligeras bajadas. Por provincias, sólo Zamora presenta una caída de estudiantes (del 0,16 por ciento), mientras que el resto registra subidas, con Salamanca (0,28 por ciento), Burgos (0,25), Valladolid (0,21) y León (0,18), con los mayores aumentos porcentuales.
Por lo que se refiere al profesorado, el curso arrancará con 35.314 profesionales, 1.105 más que en el curso anterior, cuando esta cifra alcanzó los 34.209, si bien la plantilla todavía podría incrementarse en función de nuevos desdobles que sea necesario realizar en Bachillerato en caso de incrementarse el número de alumnos, pues el plazo de matrícula no está cerrado, como ha recalcado Rocío Lucas.
También se ha dispuesto la disminución en una hora de la carga lectiva para los miembros de los equipos COVID en los colegios, a fin de que puedan desarrollar su tarea de prevención y control en el centro.
Sin bajas por la COVID
Como ha indicado la consejera, a día de hoy no se han registrado bajas de profesores por COVID, si bien al no haberse iniciado todavía el curso, el motivo de las bajas no es comunicado a Educación, situación distinta una vez se inicien las clases, cuando sí será necesario para la trazabilidad de contagios en el centro y se procederá a su “sustitución inmediata”.
De las pruebas de seroprevalencia a que los docentes han podido someterse en Castilla y León de forma voluntaria, algo más de la mitad de los profesores han acudido a realizárselas, el 1,2 por ciento de los cuales han tenido que someterse posteriormente a test PCR, cuyos resultados son del ámbito interno de la salud pública, como ha insistido Lucas.
Por lo que se refiere a interinidad, este curso arranca con 13.465 maestros interinos y 14.202 de otros cuerpos de enseñanza. En este curso, la tasa de interinos se ha incrementado en el caso de los maestros del 8,76 al 11,43 por ciento, mientras que en el resto de cuerpos ha pasado del 24,15 al 28,24 por ciento.
Asimismo, la consejera ha destacado el refuerzo de las herramientas tecnológicas en caso de que fuera necesario volver a la enseñanza telemática, con “todos los centros públicos” conectados a las aulas virtuales y conexión ultrarrápida.
También se han adquirido 17.000 portátiles adaptados a la etapa educativa, 500 de mesa y 200 paneles digitales, y se han impartido 38.500 horas de formación para profesores, después de que el estallido de la pandemia obligara el curso pasado “a pisar el acelerador” con la digitalización.
Equipamiento
En este curso se han invertido 6,8 millones de euros en equipamiento, de ellos 4,2 dedicados exclusivamente a recursos TIC; 45,5 millones para el funcionamiento de los centros, cifra similar al curso anterior, y tres millones para los programas de conciliación Madrugadores y Tardes en el Cole, para un número estimado de 10.560 usuarios.
Sobre el desdoble de grupos en Bachillerato, Rocío Lucas ha confirmado que aún están perfilando el número de los que tendrán que acudir por la tarde, ya que cualquier nueva matrícula puede suponer un nuevo grupo en determinados casos que están al borde del límite de las ratio fijadas, si bien ha puntualizado que serían “máximo cinco o seis” los que tendrían que pasar a horario de tarde.
Tampoco ha sido necesario acudir a espacios fuera del ámbito educativo, ya que se han aprovechado todos los espacios en los centros para poder repartir las clases y garantizar las ratio y la separación entre alumnos.
Por lo que se refiere al servicio de transporte escolar, este curso se ha incrementado el número de acompañantes de los alumnos en prácticamente un millar, hasta los 1.873 frente a los 875 del 2019-2020, y por primera vez los estudiantes de secundaria tendrán acompañantes que velarán por el cumplimiento de las normas y el uso en todo momento de la mascarilla.
Este año se mantienen las rutas de transporte combinadas para alumnos y otros usuarios, si bien ambos estarán separados por mamparas y los escolares tendrán asignado un asiento que deberá ser el mismo durante todo el curso, a la vez que se reforzará la higiene y desinfección de los vehículos. También se han reforzado el número de cuidadores en los comedores escolares en un 20 por ciento, con medidas de distanciamiento e higiene.
Pilar de la sociedad
Lucas ha subrayado que, junto con las medidas y exigencias aplicadas en los centros para este curso, es “fundamental” respetar también la prevención fuera del centro en un curso “diferente” que la Junta afronta con “responsabilidad e ilusión”. “Para Castilla y León la educación es el soporte de una sociedad avanzada, justa y culta, el pilar en el que se sustenta el edificio de nuestra civilización”, ha subrayado la consejera, quien ha ensalzado la labor de los equipos directivos de los centros y los docentes y ha agradecido también las aportaciones sindicales.
En la presentación, Rocío Lucas ha subrayado el mantenimiento, un curso más, de los centros rurales con tres y cuatro alumnos, que este año suman 43 -27 con cuatro y 16 con tres-, uno más que el curso anterior y tres más que en el curso 2018-2019.
Este año se incrementa la oferta de Formación Profesional Dual en un 26 por ciento, con un 46,8 por ciento más de empresas participantes en este programa.
Por lo que se refiere al programa de préstamo de libros Releo Plus, se han invertido diez millones de euros y se cuenta con una disposición de otros ocho. Además, este año se ha incorporado un coeficiente corrector para facilitar el acceso al mismo, así como medidas de compensación para los responsables y colaboradores del programa, sean o no docentes. Asimismo, se dedicarán 1,6 millones de euros en ayudas para la atención a la diversidad en el ámbito educativo.
Para evaluar la calidad del sistema, en diciembre se presentarán los datos del informe eTIMSS sobre conocimientos en ciencias y matemáticas, mientras que en abril y mayo se realizarán las pruebas de comprensión lectora para cuarto de Primaria para el informe PIRLS.