La Junta de Castilla y León ha notificado en su estadística de este miércoles el fallecimiento de un residente de un centro sociosanitario de la Comunidad en las propias instalaciones por primera vez desde el pasado 29 de junio, ya que desde entonces solo se habían sumado muertes de residentes ocurridas en hospitales.
La estadística de datos de coronavirus en residencias de mayores, centros de personas con discapacidad y viviendas tuteladas en Castilla y León desglosa las cifras de residentes fallecidos en función del lugar en el que se ha producido el óbito, bien sea la propia residencia o un centro hospitalario.
La cifra de fallecidos en las residencias ha aumentado este miércoles en un caso, al pasar de 698 a 699, algo que no ocurría desde el pasado 29 de junio. Desde entonces, solo se habían registrado fallecimientos de internos pero en los hospitales, una cifra que aquel día de finales de junio era de 795 y este miércoles, tras sumar también un caso, alcanza los 806.
En cualquier caso, en las cifras de fallecidos con COVID-19 confirmado, es superior la de casos ocurridos en hospitales que la de las residencias. No obstante, la Junta incorpora al total fallecimientos de personas con síntomas compatibles con el virus, un total de 1.105 desde marzo, y en este caso son muchos más los que se registraron en los propios centros (1.028) que los propios de los hospitales (77).
En total, han fallecido 1.505 residentes con COVID-19 confirmado y 1.105 con síntomas compatibles en el hospital y en la residencia.