La Junta de Castilla y León incrementa el número de medidas preventivas para frenar el contagio de COVID-19 en las capitales de Salamanca y Valladolid ante el incremento de casos en los últimos días. Entre ellas, se limitan las reuniones familiares a un máximo de 10 personas en Valladolid y Salamanca “tanto en espacios públicos como privados”, salvo en el caso de personas convivientes.
Según ha concretado el gobierno autonómico, se implantan “prácticamente las mismas medidas que la fase 1” de la desescalada. Así se ha acordado este martes en un Consejo de Gobierno extraordinario. “Si no cortamos los contagios y tenemos más casos, habrá más hospitalizados”, ha advertido la consejera de Sanidad, Verónica Casado.
El vicepresidente de la Junta de Castilla y León y portavoz autonómico ha reconocido que las medidas que se implantarán serán “duras y restrictivas”, pero ha advertido que esto “no es lo peor que puede ocurrir” y “no es el último paquete de medidas que estamos dispuestos a tomar si es preciso”. Estas normas, ha señalado, “no tendrán un efecto inmediato” en la incidencia del virus y ha anunciado que “con toda seguridad” habrá “un incremento de ingresos en los hospitales y de mortalidad”. “Tenemos que seguir trabajando con anticipación”, ha destacado.
Además, se establece un máximo de 15 personas en un velatorio al aire libre y 10 en espacios cerrados. La participación en la comitiva para el enterramiento del fallecido se restringe a un máximo de 15 personas. En los lugares de culto, bodas y otras celebraciones religiosas o civiles, el límite será de 50 personas en espacios al aire libre y de 25 personas en espacios cerrados, “sin superar en ningún caso un tercio del aforo”.
Este aforo máximo también se deberá guardar en cines, teatros, auditorios, circos, plazas, recintos e instalaciones taurinas o similares, además de recintos al aire libre y otros espacios.
También se mantiene este límite máximo de 25 personas en espacios cerrados y 50 en espacios abiertos en los eventos deportivos, entrenamientos y competiciones deportivas.
La actividad deportiva y física no federada solo podrá realizarse en grupos de cinco personas sin contacto físico. En el caso del deporte federado, el límite será de 5 personas en los entrenamientos, pero no se aplicará en las competiciones en las que se garanticen espacios diferenciados para cada equipo.
En los hoteles, las clases de animación deberán diseñarse y planificarse con una capacidad máxima de 10 personas -incluidos los monitores. No se modifica, sin embargo, el aforo en los alojamientos.
En las bibliotecas, archivos, museos, salas de exposiciones y otros equipamientos culturales, los grupos no podrán superar las 10 personas, incluido el monitor o guía.
Hostelería
Los establecimientos de hostelería y restauración se verán más afectados por estas medidas restrictivas que implanta la Junta de Castilla y León. El consumo en barra desaparece de nuevo y la hostelería solo podrá atender en mesa y sentados (en el interior del local). Las mesas no podrán ser de más de seis personas y con distancia de seguridad interpersonal de 1,5 metros. No se podrá consumir de pie.
En las terrazas, las mesas no podrán ser de más de seis personas tampoco y el consumo deberá ser sentados.
Actividades al aire libre para niños
Las actividades deberán realizarse en grupos de hasta diez personas, incluidos los monitores, que deberán trabajar sin contacto entre los demás grupos. Sin embargo, sí se mantiene, “en principio”, el inicio de curso con las normas que acordaron el Ministerio y las comunidades. “Ninguna de las medidas es hoy para siempre. Iremos cambiando dependiendo de la evolución epidemiológica, pero la idea es que no afecte al principio de curso”, ha manifestado el vicepresidente de la Junta de Castilla y León y portavoz autonómico, Francisco Igea.
Estas medidas se harán efectivas a partir del jueves 3 de septiembre de 2020, según ha informado este martes el vicepresidente de la Junta de Castilla y León y portavoz autonómico, Francisco Igea, que ha advertido que se encararán de que se cumplan las normas.
“La celebración que les pedimos que hagan es que cuiden de los suyos”, ha instado Igea en unas fechas en las que, un año normal, se celebrarían las fiestas patronales de ambas capitales. “No hay nada más importante que puedan hacer que cuidar de los suyos”, ha instado.
Alta incidencia
Los hospitales de Salamanca y Valladolid son los que mayor presión asistencial están soportando. En el centro salmantino, según ha informado la consejera de Sanidad, han modificado el circuito y ya hay áreas específicas para los hospitalizados que están pendientes de recibir el resultado de su pruebas PCR de COVID-19.
Verónica Casado ha advertido que la situación en varias zonas básicas de salud de ambas capitales es “compleja” con tasas de incidencia de hasta 56,7 positivos por cada 10.000 habitantes.
En el hospital de Salamanca hay 65 hospitalizados en planta y 7 hospitalizados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). En el Hospital Río Hortega de Valladolid hay 34 hospitalizados (4 en UCI) y en el Clínico, 35 hospitalizados (6 en UCI), según ha informado la consejera de Sanidad.
La misma presencia de Cuerpos de Seguridad que en marzo
Igea también se ha mostrado partidario de que los ciudadanos vean de nuevo en las calles a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y ha insistido en que “se salvan más vidas poniendo multas” que en las patrullas ordinarias. “Hay vidas en juego, aunque no se detengan delincuentes o se paren atracos”, ha insistido.