El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha mostrado su apoyo al presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, quien apura los últimos días de su legislatura y con quien ha coincidido este lunes en un desayuno informativo organizado por El Norte de Castilla.
“Hay políticos en España que quieren ser primeros espadas y no han gestionado nunca, eso es peligroso”, ha sentenciado Feijóo, al tiempo que ha defendido su creencia en la “formación y la experiencia” y el “valor” que supone el presidente de la Junta de Castilla y León para el PP.
Herrera cayó en desgracia hace cuatro años cuando, tras perder la mayoría absoluta, realizó un análisis del fracaso general de su partido y propuso al entonces presidente, Mariano Rajoy, que se mirase al espejo. Ahora, aunque aún no ha confirmado que abandone la política, no ha encontrado el acomodo que buscaba. La dirección nacional del partido no sólo ha ignorado sus propuestas para las candidaturas al Senado que dejaron fuera a su delfín, el alcalde de León, Antonio Silván, sino que tampoco le ha ofrecido un cargo a él.
El presidente de la Xunta de Galicia ha mandado un aviso al apuntar que “sería un desperdicio para España” que una persona con la experiencia de Herrera abandonara la política, tras lo que ha señalado que sería “muy útil”.
Sobre los resultados electorales obtenidos por su partido el pasado 28 de abril, Núñez Feijóo ha afirmado que se trata de un fracaso de “todo el PP” y, pese a ello, ha garantizado su respaldo al presidente del partido, Pablo Casado.
El presidente del PP gallego considera que su partido se ha mostrado algo “titubeante” con determinados mensajes durante la campaña previa a los pasados comicios y que ahora debe fijar su mensaje en “la moderación, la centralidad y la humildad”. A su juicio, el fracaso del partido se debe a la fractura del voto del centro-derecha, producto de una buena maniobra electoral del PSOE de Pedro Sánchez, quien se ha centrado en “jugar” a técnicas electorales desde el Gobierno.
Núñez Feijóo ha insistido en la importancia de afrontar los nuevos comicios “después del duelo” y en que el partido debe trabajar para que los electores “vuelvan a casa”.
Así, ha echado la mirada atrás para explicar el por qué decidió no presentarse a las primarias de su partido, una decisión que ha definido como “compleja” ya que ha reconocido que a cualquier dirigente le gustaría trabajar para ser el presidente de este país. No obstante, ha insistido en que en aquella ocasión no se dieron las circunstancias porque se trataba de tomar una decisión en 10 días y su compromiso estaba con los ciudadanos gallegos.
Ha insistido en que él está ahora “donde quiere estar” y es en su labor de presidente de la Xunta de Galicia. “Quien se aproveche de un momento de dificultad no es de fijar, si no es de fiar en el partido tampoco lo será en el Gobierno”, ha zanjado. “En diez días no se puede llevar a puerto un barco en ruta”, ha concluido.