El consejero de Cultura de Castilla y León, Gonzalo Santonja (Vox), ha destacado este viernes el valor “ecológico” de la tauromaquia frente a “calumnias sobre un hipotético sufrimiento animal en los instantes finales de la lidia”. Estas supuestas calumnias, ha asegurado, “atentan contra nuestras tradiciones y modos de vida”. En su comparecencia ante las Cortes para detallar su programa de legislatura, Santonja ha defendido que los toros son “ecología de verdad”, no “de pacotilla ni de postureo” y que genera 14.000 empleos “auténticamente verdes” en Castilla y León.
Santonja se ha declarado “taurófilo” y ha recordado que él tiene cinco libros relativos a la tauromaquia, de los cuales ha nombrado expresamente tres. Sin embargo, ha rechazado ser un “intransigente ni fanático”. “Incluso se ha pretendido contraponer mi filiación taurófila con mi condición universitaria de filólogo, catedrático de la Universidad Complutense con seis sexenios de investigación. ¿Y saben por qué no he podido aspirar al séptimo? Sencillamente porque no existe esa posibilidad”, ha afirmado.
El consejero ha mostrado su intención de mantener las novilladas que organizó el anterior consejero (de Ciudadanos), aunque los ciclos se “perfeccionarán”. También se ha comprometido a revisar la estructura y funciones de la Mesa de la Tauromaquia y hará sugerencias para reformar el Reglamento Taurino, que está en manos de la Consejería de Medio Ambiente, que dirige el PP de la mano de Juan Carlos Suárez-Quiñones.
Se “impondrá” la creación de un Centro Documental Taurino para inventariar y digitalizar los archivos “atesorados” en Castilla y León. También se lanzarán becas de investigación relativas a la tauromaquia, cuyos “valores éticos y medio ambientales” ha subrayado. También ha contrapuesto la “libertad del toro en la dehesa, espacio único, frente a la realidad de las granjas y los mataderos industriales”.
Durante su intervención (de más de una hora y media), Santonja ha recurrido constantemente a latinajos y a citas de poetas y escritores como Alberti, César Vallejo, a Lorca, Rubén Darío, Juan Manuel de Prada, Julio Camba, Juan Ramón Jiménez o Friedrich Durrematt, entre muchos otros como incluso la RAE. También ha repasado los orígenes del castellano (él ha utilizado 'español'), de los fueros y cartas pueblas del siglo IX, entre otras referencias a siglos pasados.
Concretamente, ha citado una entrevista a Lorca en la que destacaba la importancia del toreo y hablaba de la “falsa educación pedagógica” ante el toreo, una “riqueza increíblemente desaprovechada”. A renglón seguido, Santonja ha apuntado que está “intelectualmente enfrentado, con humildad y disposición al debate, sin soberbia” a quienes “hoy encarnan esa falsa educación pedagógica”.
Los pilares de la Consejería
Santonja ha enumerado las líneas de trabajo de la Consejería, “conjugadas bajo la premisa de que los españoles 'somos quienes somos', no quienes otros quieren que seamos”: “primeras palabras de nuestra lengua universal, el español que nos une; fueros y cartas-puebla o la epopeya de la libertad; diálogos españoles o el genio de las Españas; la riqueza del Patrimonio Cultural; valores éticos, medioambientales, culturales y económicos del Toro (sic); el deporte, necesidad y derecho; turismo y un gran congreso de literatura española”.
Santonja ha instado a construir el Centro de los Orígenes del Español (COE), orientado a la promoción de Valpuesta, Oña o Cardeña, Silos o Covarrubias. También quiere que la Comunidad forme parte de la red de investigación INTELE (INfraestructura de TEcnologías del LEnguaje). “Muchas veces nos quejamos, y casi siempre con razón, de la discriminación en España del español, nuestra lengua universal. Pero no formamos parte de este gran proyecto, decisivo ya para el presente y obviamente el futuro”, ha zanjado.
Además, ha apostado por —entre otros— “estudiar, editar, poner en valor y difundir” el patrimonio relativo al derecho foral e instituciones jurídico-políticas medievales “para orgullo y en beneficio tanto de la sociedad castellana y leonesa como del mundo científico y académico y el público interesado en cualquier lugar del mundo”.
También quiere organizar un gran congreso de literatura española con una sede en cada una de las universidades de Castilla y León, en las que cada una acoja un género literario: narrativa, poesía, teatro y ensayo.
En relación al deporte, Santonja ha destacado que el “mayor elemento discriminador” entre hombres y mujeres es la maternidad, así que se redistribuirán los Presupuestos “para que nuestras mejores deportistas alcancen el premio que más desean y necesitan: ayudas para el cuidado de sus hijos, oportunidades laborales y/o académicas”. “En definitiva, un nuevo enfoque que les allane el camino de la mujer como deportista y madre”, ha resumido.
“Un proyecto personal” y no de gobierno
El portavoz del Grupo Socialista en la Comisión de Cultura, José Ignacio Martín Benito, ha criticado que el de Santonja sea “un proyecto personal” y no un programa de gobierno , y que les ha “decepcionado”. “Alguien debía haber advertido que venía a un parlamento y no a la inauguración de un curso académico”, ha afirmado el socialista, que le ha reclamado saber qué va a pasar con la Fundación Siglo, la que más presupuesto gestiona de la Comunidad.
El procurador de Ciudadanos, Francisco Igea, ha reprochado que Santonja haya presentado “sus obsesiones, sus hobbies, su talento” y su “proyecto personal” y no “de Comunidad. También ha criticado su ”discurso moral“ sobre el deporte y la ausencia de mención a artistas, músicos o la política de festivales que va a llevar la Consejería. Igea también se ha preguntado cómo van a mejorar la promoción turística de Castilla y León si quieren reducir la publicidad institucional. ”Esta comunidad necesita un consejero y no una persona a acabar su vida profesional y a intentar epatarnos con sus conocimientos“, ha reprochado.
El consejero de Cultura ha apuntado también que la Fundación Siglo tiene “muchas posibilidades y muchos problemas”, entre los que ha destacado que está “lleno de personal” dedicado a museos, cuando en los propios museos hay “tres personas”.