La Junta de Castilla y León se abre a hacer “alguna aportación” al Serla “si fuera necesario” y con el “esfuerzo” también del resto, según ha explicado este jueves en rueda de prensa el consejero y portavoz del gobierno autonómico, Carlos Fernández Carriedo, que ha instado a hacer “un esfuerzo de austeridad entre todos”.
Carriedo ha descargado la responsabilidad de revertir la disolución del Serla en los sindicatos y la patronal. “Les cedemos el protagonismo en torno a cómo lo quieren hacer”, ha afirmado.
Fernández Carriedo ha insistido en que la Junta escuchará la posición de patronal y sindicatos en torno a cómo quieren que se ofrezca el servicio de mediación laboral y ha recordado en este punto que son ellos quienes rubricaron el Acuerdo para la Solución Autónoma de Conflictos Laborales (Asacl).
El portavoz del gobierno autonómico ha asegurado que actualmente no está en la labor de cómo organizar las Relaciones Laborales, “sino escuchar a los agentes de un modelo que depende exclusivamente de ellos”. “Ellos [los agentes económicos] deciden cómo arbitrar. Nosotros ponemos medios, como la financiación”, ha ofrecido Carriedo.
El Serla no tiene financiación en los Presupuestos Generales de la Comunidad, aunque la Junta ahora sí se ofrece a financiar el Serla. Carriedo ha asegurado que esto no se trata de un “cambio de postura” y que el consejero de Empleo, Mariano Veganzones tiene “conocimiento” sobre este ofrecimiento.