El candidato del Partido Popular, Jesús Julio Carnero, ha jurado este sábado su cargo como alcalde de Valladolid durante los próximos cuatro años y gracias a su pacto con Vox, con quien gobernará en coalición. El PP, empatado con el PSOE en número de concejales (11) ha tenido que apoyarse en el partido de extrema derecha, que ha obtenido tres. Así, con 14 votos, los 11 del PP y los tres de Vox, ha conseguido los 14 que establece la mayoría absoluta. De cómo se reparten las concejalías no se sabrá nada hasta el próximo lunes, momento en que se revelará en una rueda de prensa.
A la constitución del Ayuntamiento han acudido el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco (PP), el vicepresidente, Juan García-Gallardo (Vox) y los consejeros de la Presidencia, Luis Miguel Gago (PP) y de Empleo e Industria, Mariano Veganzones (Vox). En la fila de autoridades estaba también sentado Javier León de la Riva, exalcalde del PP que llegó a ser inhabilitado por desobediencia judicial.
Precisamente el discurso del alcalde saliente, el socialista Óscar Puente, se ha basado en todas las incógnitas que genera este pacto, incluidas las relativas a las políticas que aplicará. Y ha incluido reproches, recordando cómo fue su llegada a la alcaldía, con un León de la Riva que se negó a estar presente para entregarle el bastón de mando. “Quien hoy toma posesión del bastón de mando es el alcalde legitimo de la ciudad de Valladolid. Como lo es su gobierno, cualquiera que sea este, ya que su composición aún la desconocemos”, ha arrancado.
“No sería necesario expresar estas dos obviedades de no ser por los discursos que escuchamos en este mismo salón de plenos hace 8 años y por los que seguimos escuchando aun con insistencia fuera de este salón en los últimos tiempos. Subrayar esa legitimidad se hace necesario como ejercicio de indispensable pedagogía política. El desde hoy alcalde no ha sido el candidato más votado por la ciudadanía y sin embargo eso no le resta un ápice de legitimidad”, ha rematado.
“No es más legítimo ni mas democrático el alcalde que surge de la mayoría absoluta de los concejales o el que en defecto de esa mayoría lo sea por encabezar la lista más votada. Son tan legítimos y tan democráticos el uno y el otro. La defensa de la lista más votada que hacen algunos, sin más, situaría a los ayuntamientos en el terreno de la inestabilidad y de un distanciamiento aun mayor de la ciudadanía”, ha recordado. Puente ha justificado la introducción para que “ni en este salón de plenos, ni en el debate político vuelvan a escucharse frases como, abro comillas, ”coalición de perdedores“, ”los integrantes del gobierno han negociado con el estómago“, ”han repartido sillones, sueldos y tenencias de alcaldía“ ”Para ustedes lo importante era colocar a los suyos en los ansiados puestos de mando“”, afirmaciones que Puente tuvo que escuchar en 2015, cuando llegó a la alcaldía tras 20 años de gobierno del PP. Para él, el acuerdo PP-Vox es “perfectamente legítimo y democrático”, si bien a él no le gusta “nada”. El exalcalde ha puesto en situación a su sucesor sobre cómo deja el Ayuntamiento de Valladolid. “A usted nadie le llamará alcalde Okupa como a mí, aunque no haya ganado las elecciones”, ha advertido.“ Contará conmigo y con una oposición seria y responsable, con la que podrá dialogar y llegar a acuerdos. Una oposición que tendrá un interlocutor aquí en esta casa y que, con altura de miras y sentido de la responsabilidad estará para apoyar en los asuntos de ciudad, para controlar el ejercicio del poder e impedir sus desviaciones y para aportar alternativas. Si es cierto lo que dicen de que una buena oposición mejora al gobierno intentaré que usted tenga algo de lo que yo he carecido durante 8 años”.
No ha faltado el reproche al consejero de Empleo e Industria, presente en el Salón de Plenos. “Seguro que este último con usted en la alcaldía, al menos asistirá a los órganos de gobierno de la feria de Valladolid de los que forma parte y en los que no ha pisado en más de un año que lleva en su puesto”, ha recriminado a Mariano Veganzones.
Puente ha advertido a Carnero que cuenta con una “buena herencia”. “Hace 8 años me dijeron que no dilapidase la que recibía. Me dijeron: recibe usted un presupuesto de 300 millones, yo le dejo uno aprobado por 17 de los 27 concejales del pleno de 404 millones. Recibe usted, me dijeron, una liquidez de 60 Millones, usted recibe hoy 116 millones. Me dijeron, recibe usted un ayuntamiento con un valor patrimonial de 436, el doble del que nosotros recibimos en 1995. Hoy recibe un ayuntamiento con un valor patrimonial de 1200 millones, el triple del que recibí yo”, ha enumerado Óscar Puente. La presidencia del foro económico de Eurocities, un club de 200 ciudades europeas, una cumbre ministerial de la Presidencia Española de la UE, las fiestas organizadas “a falta tan solo de un concierto”, la etapa “más importante” de la vuelta ciclista a España, la organización de la gala de los premios Goya en Valladolid, una posibilidad “más que cierta” de que dos grandes empresas se instalen en Valladolid Switch Mobility e Inobat... forman parte también de la herencia de la coalición PSOE- Valladolid Toma La Palabra durante los últimos ocho años.
Entre los “handicaps” que tendrá el mandato de Carnero, Puente se ha referido a sus socios, Vox. “Unos socios que arrastrarán a su gobierno por el camino del sectarismo si usted lo permite”, ha dicho. Así, ha anticipado “lo que va a suceder en Valladolid los próximos años por la inclusión en el gobierno de una formación política que hace de la intolerancia, el negacionismo, el machismo y la xenofobia sus principales señas de identidad”.
Puente destaca la negación de la violencia de género por parte de Vox
“Llevamos tiempo aquí en la negación de la violencia de género. Camuflándola en la denominada violencia intrafamiliar. Ambas existen, pero son de naturaleza muy distinta y por ello deben recibir un tratamiento diferenciado. De hecho la violencia intrafamiliar no es tampoco tratada como el resto de violencias pues tiene una regulación diferenciada en el Código Penal. Un parricidio es un asesinato, y sin embargo tiene un tratamiento distinto y unas penas diferentes. Me pregunto qué relación familiar tenía la enfermera Vallisoletana asesinado en Bruselas con su asesino, al que no le unía nada en el momento de su muerte. O la vecina de Valladolid asesinada el de este mismo año. Ni ella ni su asesino formaban una familia. Pero mientras ustedes discuten sobre la existencia o no de la violencia de género, las mujeres mueren y precisan ayuda”, ha explicado. El socialista ha preguntado directamente si va a “dejar de existir” el centro de igualdad municipal en el que se ayuda a las mujeres víctimas violencia de género, una pregunta que ya hizo a Carnero en uno de los debates de campaña.
¿Censura en la Seminci?
“¿Qué va a pasar con el diálogo social que tan buenos resultados ha dado en esta casa? ¿Qué va a pasar con nuestro festival de cine?”, ha preguntado. “En su primera y única visita al festival el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, cito textualmente dijo ”En las últimas ediciones se ha desviado de la finalidad que tenía, apostando por proyectos ideológicos destinados a favorecer una ingeniería social y verde“, para a renglón seguido sugerir qué tipo de cine se debía programar en el festival. ”Cine sin ideología“. Por eso cuando calificamos a sus socios de extrema derecha, porque eso es lo que son, no hacemos más que apoyarnos en los hechos. En los 8 años en los que he sido alcalde jamás me he inmiscuido en el contenido de la Seminci, que está en manos de su director. Durante los 8 años en los que estuve en la oposición formé parte del patronato de Seminci que presidía el anterior alcalde popular Javier León de la Riva. Allí fui testigo del exquisito respeto que mantuvo hacia la libertad del director del festival para establecer los contenidos del mismo en los que, doy fe, jamás se inmiscuyó. Pero voy aún más atrás. En nuestro festival de cine se estrenaron durante la dictadura películas que no habían sido proyectadas antes en las pantallas de ningún cine de España. Valga por todas el estreno en 1975 de la Naranja Mecánica. Lo que Vox ha anunciado, que no es otra cosa que la orientación desde el poder político de los contenidos de festival, es algo que ni siquiera sucedía en los últimos tiempos del franquismo. Luego no se extrañen de que les llamemos extrema derecha. Es lo que son. Sr. Carnero, ¿va a dejar en manos de Vox nuestro festival? ¿Va a permitir que regrese la censura? ¿Va a dejar en manos de Vox el festival de teatro y artes de calle?”, ha preguntado.
Además, Puente ha subrayado las promesas que ha hecho Carnero, desde un estadio de fútbol nuevo, un estadio de rugby nuevo, un nuevo puente de Poniente, o el soterramiento del tren, que considera “compromisos muy difíciles, por no decir imposibles de cumplir”. El más complicado es el del soterramiento, “que de llegar algún día, tardará décadas en realizarse”.
El nuevo alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, ha mostrado en su primer discurso en el cargo un proyecto de ciudad “sin barreras” con el soterramiento del ferrocarril como “mayor motivación” en este mandato que arranca “codo con codo” con Vox, sus socios de Gobierno, informa Europa Press.
Después de tomar posesión de su cargo como alcalde, el cuarto de la Democracia y el segundo en representación del Partido Popular, y de que intervinieran los portavoces de los grupos municipales, Carnero ha ofrecido su primeras palabras en esta “encomienda”, que para él es “la más importante que hay: ser alcalde de tu pueblo, de tu ciudad”.
Tras unas extensas palabras de recuerdo a sus familiares fallecidos y de agradecimientos a los presentes, entre ellos especialmente al presidente de la Junta de Castilla y León, su compañero de partido Alfonso Fernández Mañueco, Carnero ha comenzado a repasar las siete principales áreas del programa con el que el PP ha concurrido a las urnas el pasado 28 de mayo.
De entre esas siete líneas de actuación del “contrato con los ciudadanos”, Carnero ha destacado que su mayor “motivación” en estos próximos años es “conseguir lo que los vallisoletanos se merecen, una ciudad sin barreras”, por lo que ha reiterado su compromiso para “hacer realidad el proyecto del soterramiento de las vías del tren, la mayor operación de vertebración de la ciudad, y de riqueza social, económica y medioambiental que se acometerá en Valladolid”.
Además, ha mencionado de una manera importante el objetivo de que Valladolid viva “su río” y que éste tampoco sea una barrera, y del mismo modo se ha referido a otras barreras ya no físicas sino “intangibles que dividen a las personas y generan injusticias, con medidas para avanzar en la calidad de vida y bienestar”.
El nuevo alcalde de Valladolid ha incidido en que sobre estos principios y con un “diálogo constructivo y sincero” se asienta el acuerdo “viable y firme” que han alcanzado PP y Vox para los próximos cuatro años, por lo que ha agradecido la “voluntad decidida” de la formación de derechas.
Para Jesús Julio Carnero, los casi 77.000 votos que han sumado ambas formaciones, reflejan la “voluntad de cambio” de los vallisoletanos, para lo cual se ha comprometido a trabajar “codo con codo” junto a sus socios “buscando siempre el beneficio de Valladolid, gobernando para todos los vecinos”.
Una ciudad “abierta y sin barreras” es el gran objetivo del nuevo Gobierno “entrelazado con las principales líneas de actuación” para lograr un Valladolid “preocupado y ocupado” en las personas; una “ciudad de oportunidades”; “con el medio ambiente”, con una política de movilidad “útil y eficaz”, que trabaje por el patrimonio y la cultura, “aliada con la buena gestión” y con el diálogo como principio, no solo dentro de la ciudad sino con otros municipios, como Madrid o las otras capitales de provincia de la comunidad autónoma.
Antes del discurso más formal, Carnero ha realizado una introducción en la que si bien no ha querido responder a alguna de las críticas que ha lanzado el alcalde saliente en su intervención como portavoz del Grupo Socialista y en la que ha querido explicar el motivo con el que justifica que Partido Popular y Vox no hayan dado detalles sobre su pacto ni hayan explicado que ediles formarán el nuevo Gobierno municipal y con qué responsabilidades.
“Los acuerdos para que sean acuerdos tienen una parte interna de negociación que tiene que materializarse de una manera tranquila, sosegada, y eso hemos hecho hasta ahora”, ha apuntado Carnero, que además ha defendido que “cada cosa a su tiempo” y que defiende “guardar las formas” y no actuar antes de ser designados concejales.
De esa manera ha explicado también que los concejales del equipo de Gobierno entrante no se hayan reunido aún con los ediles salientes. De hecho, ha precisado que a partir del lunes los miembros de su equipo tratarán de mantener encuentros de trabajo con sus predecesores si éstos están disponibles.
Eso sí, ha recordado que ha mantenido ya dos encuentros en los últimos días con el ya exalcalde, Óscar Puente, a iniciativa de éste: una reunión y una visita a unas obras. Tras el Pleno, y en presencia de los medios de comunicación exregidor y nuevo alcalde han tenido un breve encuentro de felicitación y han intercambiado unas palabras.