A los 71 años de edad ha fallecido José Antonio Fernández Fernández. Quizá el nombre haya muchas personas a las que no le diga nada. Pero su firma 'Fer' y lo característico de sus dibujos y sus personajes, como los de Historias Fermosas o Puticlub, son suficiente carta de presentación para identificar a este leonés nacido en Mansilla de las Mulas en 1949.
La revista satírica a la que más estuvo vinculado y la más conocida, El Jueves, que además dirigió hace pocos años, confirmaba este lunes la triste noticia del gran Fer en su cuenta de Twitter, como “maestro y gran contador de historias”.
Fer era un enamorado como pocos de la riqueza, belleza y gastronomía de la provincia leonesa, a la que siempre volvía pese a afincarse en Cataluña con sólo cuatro años. Ha sido, sin duda, el humorista gráfico de más reconocimiento que ha dado la provincia leonesa. Y es que muchos de sus conocidos personajes han estado abiertamente inspirados en esta tierra, como él siempre reconoció y de lo que estaba orgulloso, incluso abrazando satíricamente la causa leonesa frente a Castilla.
En su larga carrera de casi cuatro décadas dedicada al comic y al humor, llegó a dirigir en algunas épocas las cabeceras más importantes del país, como El Papus y El Jueves. Publicaba también un chiste diario en el rotativo catalán Avui desde finales de los años ochenta, cuando tomó el relevo al histórico Cesc, aunque el declive del sector en los últimos años le llevó de nuevo a la docencia que había iniciado en sus primeros años profesionales.
Ha sido muy conocido sobre todo por sus series en El Jueves de Historias Fermosas y Puticlub, una muy ácida serie iniciada en el año 1982 con El Urelio como protagonista con boina y que se desarrolla vete tú a saber en qué pequeño pueblo de León, contando las vidas e historias que transcurren en torno a un burdel.
Inició su carrera en el humor gráfico en la revista Mata Ratos y en El Patufet de la mano de Jaume Perich. Pronto se ocupó de un chiste diario en el periódico La Prensa. Licenciado en Historia, fue profesor de Bachillerato hasta que Gin lo repescó para dedicarse exclusivamente al humor gráfico. Ha sido impulsor de los premios Gat Perich y ostenta el título de catedrático de Honor de la Universidad de Alcalá de Henares, habiendo recibido también un homenaje en León con una exposición en 2011. En 1996 recibió también el premio Ivà al mejor historietista.