El consejero de Fomento y Medioambiente de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha anunciado las nuevas ayudas al alquiler que el Gobierno autonómico pondrá en marcha a partir del próximo jueves con un presupuesto de 5,4 millones de euros. La subvención que se da es de hasta 4 mensualidades y de 500 euros al mes.
Las ayudas están destinadas “a aquellos arrendatarios que tengan problemas transitorios del pago del alquiler total o parcialmente”, ha indicado Quiñones en una rueda de prensa conjunta con la consejera de Sanidad. Estas ayudas son, además, complementarias a los microcréditos que el Gobierno ha empezado a conceder, por lo que podrán acogerse también aquellas personas que tengan dificultades para devolverlos.
Para poder acceder a las ayudas al alquiler los ciudadanos de Castilla y León tendrán que cumplir varios requisitos. Por un lado, que desde el 14 de marzo estén en situación de desempleo, ERTE o sean autónomos que han visto reducida su jornada o hayan cesado su actividad.
Además estas circunstancias excepcionales tienen que haber provocado que sus ingresos no hayan alcanzado 3 veces el IPREM, el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples. En el caso de familias con algún miembro con discapacidad mayor o igual del 33% o dependencia, serán 4 IPREM; y 5 IPREM para los arrendatarios con persona con parálisis cerebral, enfermedad mental, o discapacidad intelectual mayor o igual que 65% a su cargo.
También podrán solicitar estas ayudas aquellos castellanos y leoneses que, con el alquiler más los gastos en suministros básicos como electricidad, gas, o telefonía, la renta suponga una cantidad igual o superior al 35% de los ingresos de la unidad familiar. Se establece un requisito adicional: que los solicitantes estén al corriente de pago de la renta de 3 últimas mensualidades inmediatamente anteriores a la solicitud.
Estas ayudas están a disposición de cualquier ciudadano de Castilla y León que esté pagando un alquiler, y se suman a los otros dos grupos de ayuda autonómica. El consejero ha recordado que el 9 de abril la Junta aprobó un extra de 3 millones en ayudas al alquiler para aquellas familias que se habían quedado en lista de espera, tras la primera partida de 15,3 millones de euros.
Esta convocatoria se suma, además, a la línea de ayudas para los arrendatarios de vivienda de promoción pública de la Junta, por las que durante un máximo de 4 meses se condona el 50% de la renta de alquiler de los inquilinos de viviendas propiedad de la Junta y se aplaza el pago del otro 50%, que se puede satisfacer prorrateado durante un máximo de 3 años.