La Fiscalía de Soria ha solicitado una pena de tres años y nueve meses de cárcel para el exprocurador socialista soriano Ángel Hernández, acusado de cinco delitos, dos de ellos en el ámbito de la violencia sobre la mujer por coacciones y maltrato a su expareja, por unos hechos ocurridos en febrero de este año.
Según ha informado la Fiscalía soriana en un comunicado, el que fuera viceportavoz del Grupo Socialista en las Cortes y número 3 del secretario regional del PSOE, Luis Tudanca, se enfrenta además a un delito de vejaciones injustas, otro de atentado contra agentes de la Policía y dos delitos leves de lesiones por agredirles durante su detención.
En concepto de responsabilidad civil, la Fiscalía reclama también una indemnización para los agentes de 2.560 euros en un caso y 120 en otro.
El escrito de Fiscalía acusa a Hernández de un delito de coacciones en el ámbito de la violencia sobre la mujer por el que solicita para él un año de prisión y la prohibición de acercarse a la perjudicada a menos de 300 metros por un tiempo de dos años.
Del mismo modo, el Ministerio Público considera a Hernández autor de un delito de maltrato en el ámbito de la violencia contra la mujer y la pena que pide es de nueve meses de cárcel, e igualmente orden de alejamiento en los mismos términos.
En cuanto a vejaciones injustas, la pena propuesta es de 20 días de localización permanente en el domicilio “separado y alejado de la víctima” y alejamiento durante seis meses.
Al exprocurador se le atribuyen otros dos delitos relacionados con los agentes que le detuvieron, uno de atentado contra la autoridad, que supondría la mayor pena solicitada para él de dos años de cárcel, y otros dos leves de lesiones contra los policías, con una multa por cada uno de ellos de 600 euros.
Los hechos que se le imputan se produjeron en febrero de 2024 cuando el expolítico acudió al domicilio de su entonces pareja, donde comenzó a aporrear la puerta profiriendo diferentes insultos hacia su expareja para que le abriera.
Ante esta actitud violenta de Hernández, la Policía Nacional fue alertada y, al presenciarse en el lugar, procedieron a su detención mientras el exprocurador les increpaba alzando con la voz y con una reacción alterada y violenta.
Tras lo sucedido, el auto del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Soria, de violencia de género y familia, puso en libertad provisional a Hernández con la prohibición de no aproximarse a menos de 300 metros de su pareja ni de comunicarse con ella.
Tras este suceso, Hernández renunció a todos los cargos, dejó su acta de procurador y se dio de baja en el Partido Socialista. El juicio contra el ex procurador se celebrará en el Juzgado de lo Penal aunque todavía no tiene fecha.