Hay pocas tradiciones más arraigadas entre los presidentes de la Generalitat que la de acudir a Madrid para pronunciar conferencias en las que se lanzan advertencias, más o menos veladas y más o menos creíbles, hacia la Moncloa. Este miércoles, siete meses después de su investidura, ha sido el turno de Pere Aragonès, que ha intervenido invitado por el Club Siglo XXI para lanzar un mensaje al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez: “Especular, jugar con el tiempo y dilatar las negociaciones no es una opción que podamos asumir, porque solo contribuye a generar dudas dudas sobre el propio proceso de negociación”, ha asegurado el jefe del Govern.
Con esta frase Aragonès ha urgido a Sánchez a que la mesa de negociación vuelva a reunirse en las próximas semanas, para cumplir el compromiso de verse “al inicio del año”, aunque ha rehuido entrar en el debate de fechas. En cambio, el independentista sí ha reclamado que ese foro no se quede en la foto y tenga contenido político de calado. “Debemos pasar del reconocimiento de que existe un conflicto político a presentar propuestas para resolverlo”, ha considerado Aragonès, que ha opinado que “hoy no hay propuestas por parte del Estado para dar encaje a las aspiraciones de los catalanes”.
Según ha expuesto el president, el actual proceso de diálogo entre Madrid y Barcelona es una “oportunidad histórica” para ambos, por lo que ha pedido al Gobierno que lo aproveche. “Ni el Gobierno del Estado ni Catalunya podemos desaprovecharla”, ha dicho, tras asegurar que “difícilmente habrá una segunda oportunidad”. En esta línea el republicano se ha remitido a su discurso de Sant Esteve cuando reclamó “resultados tangibles” y se abrió a opciones alternativas si el proceso de diálogo no funcionara.
El mensaje que el jefe del Govern quería que se escuchase en la Moncloa es el de la urgencia por comenzar a aterrizar el diálogo en el papel. Según sus deseos, para acabar en un referéndum. “El respeto a la voluntad mayoritaria es el camino que debemos recorrer, siendo imaginativos y creativos para encontrar la fórmula de hacer posible el referéndum”, ha dicho. Pero también animando al Gobierno ha dar un paso más allá de la Agenda del Reencuentro, en la que figuran mejoras en inversión o competenciales pero donde es difícil encontrar cambios respecto al encaje institucional de Catalunya.
“Nuestra propuesta es amnistía y autodeterminación, esta es la nuestra”, ha dicho. “La pregunta es, ¿cuál es la propuesta del Estado? ¿Tiene el Estado alguna propuesta para dar cobertura a las aspiraciones de Catalunya?”, se ha preguntado, para a continuación señalar cuestiones con las que, a su parecer, Sánchez puede firmar compromisos, como la protección de la lengua catalana, permitir la acción exterior de la Generalitat, “respetar” las leyes del Parlament o “actuar con la máxima transparencia ante declaraciones como las de ayer de Villarejo”.
Esta última cuestión, por ser de actualidad, ha centrado varias de las preguntas que se le han formulado por parte de los asistentes. Sobre la insinuación del excomisario Villarejo de que el CNI habría estado relacionado con el atentado de la Rambla y Cambrils en 2017, el president se ha remitido a la propuesta para abrir una comisión de investigación que ha hecho su partido junto a otras formaciones y ha considerado que hace falta “la máxima transparencia”. El jefe del Govern ha asegurado que él no tiene ningún elemento para creer en las palabras de Villarejo, pese a lo que cree que hace falta una investigación para desmentirlas.