Aragonès pronostica que en 2022 habrá “resultados tangibles” de la mesa de diálogo

Arturo Puente

26 de diciembre de 2021 21:07 h

0

El año 2022, que comenzará en una semana, debe ser el momento para que la negociación con el Gobierno dé “resultados tangibles”. Así lo ha pronosticado el president de la Generalitat, Pere Aragonès, en su discurso navideño a los catalanes que en esta ocasión el jefe del Govern ha pronunciado por primera vez el 26 de diciembre, día de Sant Esteve. El próximo año debe ser, en palabras del republicano, la oportunidad para empezar a “desbloquear el conflicto con el Estado” y cuando la mesa de diálogo “empiece aportar resultados tangibles”, ha dicho.

Unos resultados que, al parecer del president, deben “ofrecer una respuesta a la amplia mayoría de ciudadanos y ciudadanas que saben que la resolución del conflicto con el Estado pasa por el ejercicio del derecho a la autodeterminación y la amnistía”. Ese desenlace debe llegar porque, según ha subrayado, en Catalunya hay “una mayoría sólida, transversal, sostenida en el tiempo” que “desea resolver el conflicto y que no acepta ningún bloqueo”.

Pero, junto a eso, Aragonès ha abierto la puerta a que esos frutos que espera de la negociación no lleguen a confirmarse. Por ello ha reclamado que, llegado el caso, se actúe “con realismo, buscando el máximo consenso y aprendiendo del camino que hemos hecho hasta ahora” si la negociación se encalla. “Porque del mismo modo que no estamos dispuestos a renunciar a la resolución democrática del conflicto político, tampoco estamos dispuestos a renunciar a la independencia de Catalunya”, ha sostenido.

En su primer mensaje navideño desde que asumió la jefatura del Govern, Aragonès ha pronunciado su discurso desde la escuela Rosselló Pòrcel, en Santa Coloma de Gramenet, conocida por haber sido uno de los primeros centros donde se aplicó el modelo de inmersión lingüística en catalán, en el año 1983, tras la movilización de las familias y la comunidad educativa de la zona. “Una escuela nacida hace casi 40 años gracias a la tozudez de unas madres y unos padres que querían que sus hijos estudiaran en una escuela pública y en catalán”, ha descrito Aragonès.

En un escenario con claras reminiscencias al conflicto abierto tras la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya de imponer un 25% de las clases en castellano en algunas escuelas, el president se ha referido a las primeras familias que se movilizaron por la escuela en catalán. “Debemos estar enormemente agradecidos”, ha dicho. “De ellos nació el modelo actual de escuela catalana. Una escuela moderna, abierta, cercana, que construye comunidad, que cohesiona la sociedad”, ha indicado.

Por todo ello Aragonès se ha comprometido a “potenciar la escuela”, tanto por lo que respecta al modelo lingüístico de la inmersión como por su “capacidad de cohesión y generar oportunidades”. “Sin lugar a dudas, es el núcleo de la nación catalana”, ha añadido Aragonès.

El president se ha referido también a la situación sanitaria, después de que Catalunya haya sido la comunidad que ha aplicado medidas más restrictivas para esta Navidad. “Medidas dolorosas, especialmente por la época del año en la que nos encontramos, y que no durarán más de el indispensable para frenar de nuevo la pandemia y evitar el colapso del sistema sanitario”, ha puntualizado Aragonès, que ha asegurado que las restricciones tienen como objetivo “reducir la movilidad y la interacción social” y que vienen acompañadas de ayudas económicas para los sectores más afectados.

En la misma línea y tras agradecer el esfuerzo del personal sanitario y de todos los trabajadores públicos en la pandemia, el jefe del Govern ha hablado también de los problemas económicos por los que están pasando muchas empresas y trabajadores. “Estoy convencido de que en 2022 conseguiremos acabar de darle la vuelta”, ha dicho, entre otras cosas gracias a los fondos europeos Next Generation. “Dejemos atrás los discursos derrotistas y reforzemos la confianza en nosotros mismos”, ha pedido a los catalanes.