La titular del juzgado de instrucción 25 de Barcelona, Elena Carasol Campillo, ha ordenado mantener en prisión preventiva a Sidil M., el mantero detenido el pasado 18 de mayo por agredir presuntamente a un agente de la Guardia Urbana con una rama. La magistrada toma esta decisión por tres motivos, en primer lugar por el propio delito relacionado con las lesiones presuntamente causadas por el mantero al policía y también el vídeo en el que se ve al vendedor huyendo de los agentes y después golpear a uno con una rama. Pero además, la magistrada señala el “riesgo de fuga” de Sidil M. motivado por “la condición de extranjero del investigado, el cual carece de permiso de trabajo y residencia”, para mantenerle en prisión
En declaraciones a este diario, el abogado de Sidil M, Andrés García Berrio, ha tildado de “totalmente injusto” su mantenimiento en prisión preventiva, y ha contrapuesto las razones de la magistrada. Así, García Berrio ha considerado “acreditado” el arraigo social en nuestro país del mantero por los informes de una trabajadora social que señalaron que el mantero lleva once años viviendo entre Barcelona y Madrid.
La jueza ha señalado que Sidil M. requirió de un intérprete en su declaración ante el juzgado para argumentar el riesgo de fuga y la falta de arraigo. Además, ha tildado al mantero “incitador de conductas delictivas” dada la “heteroagresividad del investigado no solo contra el agente de la Guardia Urbana sino contra el mobiliario público”.
Por su lado, García Berrio afirma que el riesgo de fuga “no puede justificarse en que no tiene arraigo y utilizar para ello que empleó el derecho al intérprete para poder expresarse en su idioma en una declaración muy delicada”. “Habla perfectamente castellano, así me he comunicado con él en todo el caso”, añade el letrado, que pide “una reflexión sobre los estereotipos y los estigmas existentes en el sistema penal”.
Las consideraciones de la jueza sobre el mantero detenida no terminan aquí. En el auto en que deniega la solicitud de García Berrio para que Sidil M. saliera de la cárcel, la magistrada considera que el 18 de mayo el vendedor “puso en riesgo la convivencia ciudadana y la paz pública a la que los ciudadanos de Barcelona y sus visitantes tienen Derecho”.
García Berrio ha anunciado que recurrirá a la Audiencia de Barcelona la decisión de la magistrada. El letrado recuerda que el 18,6% de los extranjeros presos son preventivos, mientras que el porcentaje de reclusos preventivos nacionales baja a la mitad, hasta el 9,9%.
Tanto la Fiscalía como la acusación particular, que ejerce la Guardia Urbana a través del despacho Molins & Silva gracias a un contrato con el Ayuntamiento de Barcelona, también han utilizado la supuesta “falta de arraigo social” de Sidil M. para pedir su mantenimiento en prisión.