Cuatro manteros están en prisión provisional desde el pasado 30 de julio tras una operación en que los Mossos d'Esquadra detuvieron a un total de siete vendedores en un piso de Barcelona. La policía catalana ha ido un paso más allá y, además del tradicional delito contra la propiedad industrial con el que sanciona el 'top manta', ha imputado un delito de pertinencia a grupo criminal a los siete vendedores. El atestado policial, al que ha tenido acceso este diario, fundamenta la acusación de grupo criminal en que cuatro de los detenidos son hermanos y en el modo de vida habitual de todo mantero: entrar y salir de casa con la manta o ser detenido por la policía. Por otro lado, uno de los manteros también está acusado de blanqueo de capitales. El motivo es que, según el atestado, “se presume que realiza ingresos de dinero en metálico” en una entidad bancaria.
La venta ilegal y el 'top manta' están tipificadas en el Código Penal como un delito contra la propiedad industrial. El atestado policial describe la “organización criminal” de la que formarían parte los manteros para perpetrar un delito “continuado” contra la propiedad industrial en base a un seguimiento a lo largo de una semana del grupo de manteros que residía en un piso del Eixample de Barcelona.
El atestado señala cuatro motivos para considerar que los vendedores ambulantes formaban parte de un grupo criminal. En primer lugar, la policía catalana señala que “estamos ante un grupo de más de dos personas, algunas unidas por vínculos permanentes estables de amistad o familiares”. Se da la circunstancia de que cuatro de los detenidos son hermanos.
En segundo lugar, los Mossos creen que el grupo “tiene una cierta consistencia y permanencia en el tiempo y por lo tanto forman un grupo estable”. Esta acusación se basa en los 109 antecedentes policiales que acumulan los detenidos por dedicarse al 'top manta'. Los abogados de los detenidos matizan que los manteros no tienen antecedentes penales y que basta con una identificación en la calle para lograr un antecedente. Con todo, para los Mossos la finalidad de vender en la calle es “exclusivamente delinquir”.
Otra de las bases de la acusación de grupo criminal es que, según los Mossos, los detenidos “actúan de manera coordinada y concertada”. Para sostenerlo, la policía señala, que, de la vigilancia realizada en el piso de los detenidos, se ha visto “entrar y salir a diferentes horas del día a algunas de las personas investigadas” y a “compradores o transportistas de productos posiblemente falsificados”. El atestado no concreta si está identificada alguna de estas personas que supuestamente compraban o traían los productos al piso de los detenidos.
Asimismo, la policía asegura que los detenidos tenían “diferentes roles” y se “repartían tareas y funciones”, lo que, según los Mossos, acentúa la pertenencia a grupo criminal. ¿De qué roles se trata? De los ocho investigados –los siete detenidos más otro mantero que terminó en el CIE días antes de la operación–, seis simplemente son manteros o “vendedores de base”, según el atestado.
Otros dos tienen la categoría de “miembros relevantes del grupo investigado”, aunque los Mossos no especifican en el atestado qué función realizaban. Se limitan a señalar que son “personas sin cuya actuación no sería posible en determinadas ocasiones cometer el hecho en su máxima expresión” y que se “lucran” con el mismo.
Uno de ellos, además de ser “miembro relevante del grupo investigado”, sin una tarea concreta dentro del mismo, es “blanqueador”, de ahí que se le acuse de blanqueo de capitales. El motivo es que del seguimiento que los Mossos realizaron durante cuatro días del mes de julio, el mantero acude “regularmente” a una oficina bancaria y “se presume que realiza ingresos de dinero en metálico” ya que sale de casa con una “bolsa de mano de pequeñas dimensiones tipo 'riñonera' con algo en su interior [...] y al salir de la entidad la bolsa de mano está vacía y abierta”.
La “coordinación” a la que también hacen referencia los Mossos para fundamentar la acusación de grupo criminal se basa en que los detenidos están “especializados” en el 'top manta'. La policía catalana señala que los manteros “tienen que saber en todo momento” qué artículos pueden adquirir, así como las zonas de venta, los horarios y “cuál es la moda actual para pedir al momento los artículos”.
“Delirio jurídico”
La Fiscalía y la jueza asumieron la tesis de los Mossos, y el pasado 30 de julio la instructora dictó orden de prisión provisional –que ha sido recurrida– para cuatro de los siete vendedores. Los abogados de los detenidos, por contra, han lamentado en declaraciones a este diario la actuación policial y han calificado el atestado de “barbaridad” y “delirio jurídico”.
“Los Mossos han construido un relato criminal alrededor de la vida cotidiana de los manteros”, ha denunciado la letrada de dos de los vendedores, Montse Fernàndez. El otro encargado de la defensa de los manteros, el abogado Andrés García Berrio, ha recordado que la actuación contra los manteros llega un año después de la reforma del Código Penal del PP que reintrodujo el 'top manta' como delito penal. “Que los Mossos asuman la repenalización del 'top manta' y de ahí acusen de organización criminal supone cruzar una línea roja muy delicada”, ha aseverado.
“Se atribuyen roles sin pruebas que puedan soportar el mantenimiento en prisión provisional de los manteros”, ha añadido Fernàndez. Ambos letrados han considerado que el atestado es un relato de la vida cotidiana de los manteros y que les atribuye roles de grupo criminal “sin pruebas fehacientes”.
García Berrio también ha recordado que la V Convención de Naciones Unidas contra la delincuencia transnacional del año 2000 considera grupos criminales organizados a aquellos que buscan cometer crímenes penados con más de cuatro años de prisión, pena a la que no llega el delito contra la propiedad industrial con el que se castiga el 'top manta'. “Este tipo penal se limita a las conductas más graves y obviamente el 'top manta' no puede serlo. Es un precedente absolutamente negativo y esperemos que la lógica se imponga pronto”, ha zanjado.