El Observatori DESC, entidad en defensa de los derechos económicos, sociales y culturales, ha interpuesto una querella –una personación como acusación popular– contra la empresa Norvet Negotial, Desokupa y dos miembros de esta última. El Observatorio acusa a las empresas citadas de “violar derechos de interés público”, tal y como ha informado este jueves la entidad a Catalunya Plural. Desokupa ha protagonizado algunos episodios polémicos en los últimos meses por acciones en el barrio de Gràcia o el Raval, entre otros.
Una de estas acciones, en la calle de la Cera (Raval), supuso la intervención de los Mossos y del propio consejero del distrito, Jordi Rabassa, a finales de agosto. Desokupa, una empresa especializada –según se puede leer en su web– en el “desalojo de pisos ilegales”, se presentó en el piso del Raval con la intención de desahuciar a las personas ocupantes del inmueble. La propia Asamblea del Raval consideró la movilización ante Desokupa como una victoria de los movimientos sociales ante “intentos de desalojos extrajudiciales”.
No se trataba de la primera práctica de la empresa Desokupa estos últimos meses. En el mes de abril, en Can Dimoni (Gràcia), la empresa también practicó una intervención. Esta es la que ha propiciado la querella del Observatorio La entidad en defensa de los derechos promulga que se produjeron “amenazas, coacciones y destrozos” en el piso durante la intervención de la empresa de desahucios.
La querella ha sido interpuesta contra la empresa Norvet Negotial; administradora de Can Dimoni, según ha podido saber La Directa. Y también contra Desokupa, que cuenta más de 30 servicios realizados en Barcelona, y dos miembros de esta.
La situación de emergencia habitacional en Catalunya, con 40 desahucios diarios –según datos del Observatori DESC– y, más concretamente en Barcelona con los alquileres a precios históricos, “dificulta de forma preocupante” el acceso a la vivienda. El Observatori alerta del peligro de la “normalización” de praxi como las de Desokupa.
El Observatori considera esta querella como acusación popular una forma de “litigio estratégico”. Una forma de presión para conseguir alboroto, y así forzar el “cierre” de la empresa Desokupa. El Observatori añade que esta denuncia debe ir acompañada de movilización social: la PAH ya ha advertido que se organizará ante el aumento –decía en un comunicado en junio– de “mafias” que desahucian con prácticas que extorsionan a las personas.