Coincidiendo con los 2.000 días de retraso en la reforma de La Rambla de Barcelona, la oposición en bloque reclamó el martes al Ayuntamiento que haga público el calendario de obras para reformar el famoso paseo y dote el proyecto de presupuesto para que la reforma pueda empezar ya el 2022.
Así lo recoge una proposición presentada por ERC en la Comisión de Urbanismo del Ayuntamiento y que contó con el apoyo del resto de grupos, también los dos del gobierno. JxCat también presentó un ruego en una línea similar, coincidiendo con los 2.000 días de retraso de la reforma que marca el contador instalado en el paseo por parte de la asociación Amics de la Rambla. La oposición ha reprochado este retraso al Consistorio y ha recordado que el proyecto para transformar la Rambla cuenta con un amplio consenso político y social.
Los diferentes grupos coincidieron en destacar que se trata de un retraso “injustificable” y criticaron que la reforma de este icono urbanístico de la ciudad no sea una prioridad para el gobierno municipal.
La teniente de alcaldía de Urbanismo, Janet Sanz, justificó que 'los tempos' son los necesarios, puesto que la propuesta de transformación de la Rambla ha tenido sus “complejidades técnicas”. Según Sanz, están a punto de aprobar el proyecto y si hay acuerdo y presupuesto se podrán iniciar las obras en 2022. “Si se aprueba el proyecto antes de finales de año podemos incorporarlo en los presupuestos”, señaló instando la oposición, y en especial ERC, a apoyar las cuentas del 2022.
Por su parte, el edil Jordi Coronas (ERC) respondió a Sanz que el 2020 ya había una partida reservada por la reforma de la Rambla y la acusó de “trilerismo”. Coronas añadió que si el gobierno municipal tuviera la intención de incorporar una partida en el presupuesto del 2022 “ya estaría ahí” y le ha reprochado que se piensen que se puede negociar como si fuera un intercambio de cromos.