La Generalitat de Catalunya ha decidido este jueves imponer un cierre perimetral a todo su territorio durante los próximos 15 días y acompañarlo además con cierres de todos los municipios durante los fines de semana. Con estas medidas el Govern pretende reducir lo máximo posible la movilidad de la ciudadanía para tratar de reducir el índice de contagios en la comunidad. La duración inicial de estas restricciones será de 15 días, aunque las autoridades sanitarias ya advierten que podrían prolongarse, como en la práctica se han extendido la mayoría de las medidas para combatir la pandemia.
Según ha anunciado el Govern las restricciones a la movilidad comenzarán a partir de las 00 horas de este viernes y, en el caso de los cierres de municipios, se extenderán hasta las 6 de la mañana del lunes. Se exceptúan de estas prohibiciones los viajes por causas de fuerza mayor y desplazamientos debidamente justificados.
Junto a las nuevas restricciones de la movilidad, el Govern mantendrá además algunas de las medidas ya tomadas, como el toque de queda nocturno y el cierre con carácter general de la hostelería. En la reunión del Govern se ha decidido también aumentar las restricciones al comercio, sector en el que deberán cerrar las superficies de más de 800 metros cuadrados, con la salvedad de servicios esenciales y alimentación, lo que supone el cierre de los centros comerciales.
Además se ha decidido suspender todas las actividades extraescolares, toda la actividad cultural, incluyendo cines y teatros, y los centros deportivos, como gimnasios públicos y privados.
Respecto a la actividad escolar, la Generalitat ha optado por mantener la presencialidad total en primaria, pero abrir la puerta a que los centros opten por un modelo híbrido en la educación postobligatoria (Bachillerato y FP). Las universidades mantendrán las clases únicamente telemáticas. El Govern asegura que continuará promoviendo además el teletrabajo, de acuerdo con las características de la empresa.
El confinamiento perimetral de municipios durante el fin de semana es una medida por la que, hasta el momento, solo Catalunya ha apostado. El decreto del estado de alarma, prorrogado este mismo jueves en el Congreso, establece que los cierres perimetrales, tanto de las autonomías como de otros ámbitos territoriales inferiores, deben tener una duración de al menos siete días. Las dudas han surgido en el caso de la Comunidad de Madrid, donde han optado por imponer restricciones a la movilidad únicamente durante los puentes de noviembre, que en su caso son dos, antes de esperar a que el Gobierno central respondiese si esta opción cabe en el estado de alarma aprobado.
Por su parte, la Generalitat entiende que puede decretar estos cierres perimetrales de fin de semana al entender que no es una medida independiente del confinamiento perimetral del conjunto de la comunidad, es decir, que es un paquete conjunto que dura más de siete días, en concreto 15. La consellera de la presidencia, Meritxell Budó, ha explicado que esta propuesta había sido tratada con el Ministerio de Sanidad, que no había puesto problema, por lo que ha considerado que están “plenamente dentro en el marco normativo”.
Las nuevas medidas en Catalunya llegan después de que durante toda la semana las autoridades sanitarias y los miembros del Govern hayan repetido como un mantra que no se descartaba nada.
El Ministro de Sanidad, Salvador Illa, recordó este miércoles en TV3 que el decreto de estado de alarma no permite el confinamiento domiciliario. “Ni de un día, no de dos, ni de un fin de semana”, especificó, y añadió que nadie del Departamento de Salud le había trasladado la voluntad de adoptar una medida de este tipo. Y eso que Illa se reunió con la consellera del ramo, Alba Vergés, el pasado lunes.
El Departamento de Salud calificó esta semana de “crítica” y “casi insostenible” la evolución de la epidemia, aunque a su vez aseguraron que antes de adoptar nuevas medidas querían esperar a ver si las últimas que aprobaron surtían efecto. Era el caso del cierre de bares y restaurantes, vigente en Catalunya desde el pasado 16 de octubre, así como el cierre de aulas universitarias o la reducción de aforos en comercios al 30%, medidas que ya se advirtió que se mantendrían.
Los contagios de coronavirus no han dejado de crecer en Catalunya hasta alcanzar una incidencia acumulada de 654 por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días. El municipio de Vic, el que registra más casos de toda españa, tiene una incidencia que se acerca a los 1.500. La única buena noticia es que en las últimas 48 horas se ha detectado una ligera reducción de la velocidad de contagio (la llamada RT, ahora en 1,34), pero la presión en los hospitales sigue subiendo y las UCI ya rondan el 50% de ocupación de pacientes con COVID-19.
Desde que entró en vigor el estado de alarma y el toque de queda –en Catalunya, de las 22 a las 6 horas–, ya han anunciado su cierre perimetral un total de 10 comunidades.