El rechazo de la Fiscalía belga a la euroórden contra los exconsellers Toni Comín, Meritxell Serret y Lluís Puig puede tener consecuencias en el Parlament de Catalunya. Una vez el diputado Comín ha quedado en libertad plena y liberado de las medidas cautelares que le impedían salir de Bélgica, Ciuadanos ha anunciado este miércoles que reclamará a la Mesa del Parlament que se retire el voto delegado que el exconseller viene utilizando.
Inés Arrimadas ha asegurado en rueda de prensa que el voto delegado es un “privilegio” del que disfrutan tanto Comín como Carles Puigdemont, pero que en el caso del primero ya no puede justificarse. Al parecer de la líder de la oposición, Comín debe acudir al Parlament si quiere emitir su voto, y no hacerlo es una decisión que solo depende de él al no tener medidas judiciales que se lo impidan.
“Comín delega su voto gracias a una resolución que decía que no podía venir porque estaba a disposición de las autoridades belgas. Pues bien, eso ya ha cambiado”, ha asegurado Arrimadas. Pese a esta argumentación, desde Ciudadanos ya se mostraron contrarios a la delegación de voto mientras las autoridades belgas impedían a Comín abandonar el país, como es el caso en el que se encuentra actualmente Puigdemont.
La iniciativa de Ciudadanos es un nuevo capítulo de la 'paradoja de la euroorden', según la cual la petición de extradición del magistrado del Supremo Pablo Llarena de los dos diputados, Puigdemont y Comín, dio a sus grupos JxCat y ERC mayoría suficiente para investir sin necesidad de contar con votos afirmativos de la CUP.