Las carreteras de alta capacidad de Catalunya registran a las cuatro de la tarde de este jueves colas de más de 60 kilómetros en la operación salida por la verbena de Sant Joan. El atasco más grande se sitúa en la AP-7 en dirección a Tarragona, donde hay hasta 27 kilómetros de retención entre Sant Andreu de la Barca y Santa Perpètua de Mogoda.
En sentido norte, hacia Girona, se dan 20 kilómetros de cola que empiezan en Granollers y llegan hasta Cerdanyola del Vallès. El otro foco de congestión se encuentra en la A-2, en dirección a Lleida, donde hay 18 kilómetros de retención entre Castellbisbal y Sant Joan Despí.
Las congestiones también salpican otros puntos del mapa viario como la B-23, en Papiol en dirección a Tarragona, donde hay 8 kilómetros de atasco, o la C-32 en Sitges, con 11 kilómetros.
Las retenciones empiezan ya en las salidas de la ciudad de Barcelona, según informa el Servei Català de Trànsit, que apunta que la Ronda Litoral presenta 11 kilómetros de circulación densa. Igual pasa en la Ronda de Dalt, donde hay más de 10 kilómetros de retenciones.
El grueso de estos atascos se ha iniciado justo después de la hora de comer, pero la jornada ya ha empezado cargada en la AP-7, donde esta mañana se han registrado retenciones de 9 kilómetros a causa de un accidente sin heridos graves.