Todos los consellers de Junts han puesto su cargo a disposición del partido. Lo ha desvelado el secretario general del partido, Jordi Turull, en una entrevista en Rac1 en la que ha reconocido que la relación con ERC es “cada vez más difícil” de reconducir. “Nos sentimos bastante expulsados del Govern”, ha afirmado.
La cúpula de Junts ha iniciado una extensa larga reunión este jueves en la sede del partido, a la que ha llegado el ya exvicepresident Jordi Puigneró escoltado por los dos máximos responsables de la formación neoconvergente, Turull y Laura Borràs, en un claro señal de apoyo al político destituido. En paralelo, Aragonès ha permanecido en el Palau de la Generalitat, sin actos en su agenda, a la espera de recibir la respuesta de su todavía.
Tras la decisión de Pere Aragonès de cesar a Puigneró como intento de atajar la mayor crisis vivida por el actual Ejecutivo, Junts lo calificó de “error histórico”, y este jueves el secretario general Jordi Turull ha concedido una entrevista en la que defendió que el exvicepresident siempre había sido “leal” al Govern.
Turull ha defendido la decisión de su partido de plantearle a Aragonès una cuestión de confianza –el detonante de la crisis–, al entender que el president no está cumpliendo el acuerdo entre ambas formaciones para avanzar hacia la independencia. El secretario general ha añadido además que Puigneró no pudo informar con antelación a Aragonès de que iban a mencionar esa cuestión de confianza en el Parlament porque él no sabía del anuncio –solo que el partido lo barajaba como una “posibilidad”–.
Sobre si la situación dentro del Govern es sostenible de cara al futuro, ha insistido en el escaso cumplimiento del acuerdo entre los dos socios: “El mayor factor de estabilidad del Govern es tener clara la partitura, y esto es el acuerdo que firmamos”.
Turull ha asegurado asimismo que se quedó “perplejo” al conocer la determinación de Aragonès de cesar al vicepresident. “Le dije que era un error, que Puigneró había sido leal”, ha desvelado el líder de Junts. También le comunicó, ha añadido, que aquella decisión no contribuía a “arreglar las cosas”.
Aragonès compareció este miércoles pasadas las 23.00 para anunciar la destitución de Puigneró como un intento de atajar la crisis abierta en el seno del Govern después de que desde Junts amenazasen con reclamarle una cuestión de confianza. El president lo atribuyó a una deslealtad por parte del vicepresident al no haberle informado del movimiento de Junts.
De esta forma, Aragonès dejó la pelota sobre el tejado de los posconvergentes, que deben decidir ahora si buscan un sustituto para Puigneró, tal como les ha pedido del president –por ahora, el cargo quedará sin cubrir–, o si optan por salir del Ejecutivo. La formación que dirigen Turull y Laura Borràs ya tenía de hecho en sus planes someter a votación de la militancia la necesidad o no de abandonar el Govern.
Junts reaccionó a la expulsión de Puigneró con un comunicado en el que calificaba la decisión de “error histórico” que “pone en peligro la continuidad del proyecto independentista”. “La decisión de Pere Aragonès vulnera el acuerdo de Govern firmado entre los dos partidos, y defrauda el mandato del 14F [la fecha de las elecciones]”, afirman.
El cese de Puigneró fue un golpe de autoridad del president ante la que ha resultado ser la mayor crisis vivida en el seno del Govern de ERC y Junts en este año y cuatro meses de andadura. El anuncio llegó después de una jornada de reuniones de urgencia. Aragonès reunió primero a sus consellers, entre otros motivos para conocer la opinión de los de Junts sobre la cuestión de confianza. Al conocer su cierre de filas con el partido, convocó al secretario general de la formación, Jordi Turull, para abordarlo.
Vilagrà (ERC) descarta “con rotundidad” una elecciones
Por su parte, la consejera de la Presidencia de la Generalitat, Laura Vilagrà, de ERC, ha descartado “con rotundidad” la convocatoria de elecciones y ha defendido que el Ejecutivo catalán es vigente. “El Govern continuará, el Govern es vigente. Justamente empezó hace un año y medio, tenemos un programa de Govern que estamos ejecutando”, ha sostenido en una entrevista en Catalunya Ràdio.
Vilagrà ha asegurado que “el conjunto de los consellers” expresaron su voluntad de trabajar ante una situación política, económica y social que ha calificado complicada. “Tenemos que trabajar todos los miembros del Govern en la misma dirección. Tenemos que tener confianza, tenemos que poder contarnos las cosas, tenemos que trabajar con lealtad. Es lo que tenemos que hacer. Espero que sea así a partir de ahora”.
PSC y Comuns dan la coalición por muerta
El líder de la oposición catalana, Salvador Illa (PSC), ha señalado en una entrevista en Catalunya Ràdio que “ya veía venir” la ruptura del Govern de coalición, pero que no “esperaba” que “fuese tan rápido”. Illa ha explicado que le sorprendió la propuesta del acuerdo de claridad presentada por Aragonès durante el debate de política general en el Parlament, especialmente el hecho de que no lo hubiese consultado previamente con su socio de Govern. “En un Gobierno de coalición es normal que haya diferencias”, ha señalado el líder de la oposición. “Pero debe haber una mínima hoja de ruta compartida”.
Por su parte, Jéssica Albiach, presidenta del grupo parlamentario de los Comuns, ha dado directamente por “muerta” la entente de ERC y Junts. “Han entrado en una carrera para ver quién es el culpable”, ha dicho en una entrevista en Las mañanas de RNE. Aun así, Albiach ha afirmado que Aragonès perdió una oportunidad importante de cerrar una crisis“ al no poner fin al actual Ejecutivo.