Los Mossos d'Esquadra han detenido este martes a una persona por su presunta implicación en la muerte de al menos tres personas sin hogar desde el 16 de abril en el distrito del Eixample de Barcelona, todos con una barra de hierro, según informa Europa Press. Se investiga, además, su posible relación con un cuarto caso del 18 de marzo.
Según ha adelantado La Vanguardia, el detenido es un hombre de 25 años que vivía en una cabaña en Valldoreix, una localidad a las afueras de Barcelona. Se le ha detenido durante la madrugada en Sant Cugat (Barcelona), pocas horas después de que presuntamente cometiera su último crimen. Los ataques se producían, según han explicado fuentes de los Mossos, “sin que las víctimas se pudieran defender” y con “violencia gratuita”.
El conseller de Interior, Miquel Buch, y el intendente del Àrea d'Investigació Criminal de Barcelona, Joan Carles Granja, han comparecido a mediodía para explicar que con la detención de este martes consideran que los asesinatos de personas sin hogar deberían acabar, dando a entender que imputan al detenido varios de los crímenes. Con todo, Granja ha evitado confirmar si consideran al detenido autor de los cuatro asesinatos que se han producido contra personas que duermen en la calle.
Según ha asegurado Buch, para el cuerpo de Mossos esta ha sido una investigación “prioritaria” por tratarse las víctimas de personas vulnerables. El conseller ha felicitado a los agentes y ha resaltado que la investigación se seguía desde hacía varios días y ha conllevado una relación muy estrecha con las entidades de ayuda a las personas sin hogar.
Sobre la motivación del detenido, Granja no ha entrado a concretar las pesquisas seguidas por los agentes, pero sí ha asegurado que el discurso del presunto asesino es “incoherente”, lo que lleva a pensar a los Mossos que pueda tratarse de un hombre con “dificultades mentales”, según ha expuesto el Intendente.
El último ataque ocurrió durante la noche de este lunes en la calle Rosselló de Barcelona y la víctima fue de nuevo un indigente que dormía en la confluencia de las calles Rosselló i Sardenya de la capital catalana. El agresor le destrozó la cabeza a golpes mientras dormía en un modus operandi idéntico a los dos homicidios, también de personas sin techo, registrados el 16 y el 18 de abril en los alrededores del Auditori y en la calle Casp de Barcelona. Las víctimas tenían 27 y 60 años.
Los Mossos investigan si el detenido también tiene relación con el asesinato de un hombre ocurrido el 18 de marzo, en la calle Sardenya, si bien este caso se utilizó un arma blanca.