Cerca de 200 personas se han concentrado en la plaza Sant Jordi de Salou en protesta por el fallecimiento de un hombre sengalés de 50 años en el marco de una batida de los Mossos d'Esquadra contra el top manta. Según fuentes policiales, la muerte se ha producido cuando el hombre ha saltado por un balcón, tratando de huir de los agentes que han entrado en su casa, en un tercer piso, en la madrugada del martes. La operación se ha saldado con 12 personas detenidas.
Tras conocerse la noticia de la muerte, unas 200 personas se han acercado a las inmediaciones de la vivienda del fallecido, produciéndose momentos de tensión entre los concentrados y los Mossos desplegados. El grupo de personas que protestaba culpa a la policía de la muerte del hombre, y querían evitar que se llevasen su cuerpo.
La retirada del cadáver del senegalés fallecido ha causado malestar entre los concentrados, que han lanzado objetos del mobiliario urbano. Mientras, los efectivos policiales, han efectuado una carga contra ellos y han acabado disparando proyectiles de foam. Finalmente, el coche fúnebre ha logrado pasar y ha retirado los restos mortales.
Tras la carga policial, el grupo ha corrido por la calle Barcelona hasta las inmediaciones de la estación del tren, extendiéndose los disturbios por el centro de la localidad costera. Los concentrados han utilizado contenedores y vallas para cortar el tráfico de las calles y del ferrocarril. Varios coches de policía han sido atacados. Las líneas de tren entre Cambrills y Port Aventura han sido cerradas temporalmente al tener impedido el paso por la localidad. Los cortes afecta a la línea R16 y a los trenes de largo trayecto del Corredor del Mediterráneo.
Según testigos presenciales, durante los altercados varias personas han resultado heridas leves, entre ellas un turista, que presentaba una brecha en la cabeza. Los Mossos d'Esquadra han desplegado a unos cien agentes en cinco furgonetas de la Brigada Móvil (BRIMO) y diez del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO), unidades de refuerzo enviadas a un lugar determinado en caso de necesidad.
En estos momentos los altercados se han calmado, aunque la tensión continúa. Los Mossos d'Esquadra han enviado a la zona a diversos mediadores de la comunidad senegalesa. La comunidad senegalesa en Salou es una de las más arraigadas de Catalunya, donde viven cerca de 1.200 personas con origen en el país africano, según cifras del Idescat.