Falsa flexibilidad horaria, presiones desde la oficina para finalizar los pedidos o un sistema de puntuación ineficaz. Estas son algunas de las denuncias de los repartidores de Glovo, que este jueves están en huelga. El paro laboral lo organiza la plataforma ridersxderechos, que agrupa a los repartidores con el objetivo de negociar mejoras laborales con la empresa.
“Queremos negociar con la empresa para que nos contrate como asalariados o poder actuar de verdad como autónomos”, ha explicado Brian González, portavoz del comité de huelga, en la concentración que los 'riders' realizan este mediodía frente a la Sagrada Familia de Barcelona. González ha insistido en que la protesta busca abrir una negociación con Glovo que resulte beneficioso “para clientes, trabajadores y empresa”. “Queremos dejar de ser esclavos de la aplicación”, ha agregado.
El motivo principal de la huelga es la condición de falsos autónomos de los repartidores de la empresa. Los 'riders' protestan porque si bien como autónomos deberían poder trabajar las horas que quisieran, en la práctica, denuncian, las horas que dependen de lo que les ofrece la plataforma a través de la aplicación, según los puntos que tengan.
Todos los repartidores de Glovo cuentan con una puntuación que va del 0 al 100. Esta cuenta crece cuantos más pedidos se entreguen, y varía en función de las puntuaciones que consumidores y restaurantes den al 'rider'. Además, los trabajadores solo tienen un número limitado de horas de trabajo al día disponibles. Los lunes y los jueves se revelan las horas que el trabajador podrá trabajar durante la siguiente semana.
El sistema exige trabajar todas las horas para poder mantener la puntuación, ya que se restan puntos si no se trabaja las horas disponibles. Eso se suma al hecho que los trabajadores no tienen ninguna herramienta para justificar los retrasos. “Cada mañana nos levantamos con el miedo que nos hayan bajado puntos”, denuncia González.
Además, para aumentar ese número de horas disponibles, que inicialmente no excede las tres o cuatro horas, es necesario mantener una puntuación alta y llegar a un mínimo de 5.577 pedidos. Según González se necesita trabajar en la plataforma alrededor de dos años seguidos para aumentar ese límite.
Las condiciones de los 'riders' de las plataformas como Glovo o Deliveroo han terminado en los juzgados de lo social de toda España. En el caso de Glovo, ha perdido cinco demandas en las que la justicia ha reconocido la condición de falsos autónomos a los repartidores, mientras que ha ganado en cuatro ocasiones. Por contra, Deliveroo perdió el macrojuicio contra 500 repartidores. La disparidad de la sentencias deja la resolución del conflicto en manos del Tribunal Supremo.