Javier Krahe: “Viene un nuevo orden”

Javier Krahe (Madrid, 1944) acostumbra a venir un par de veces al año a Barcelona y, aunque considera que es mejor la sala Luz de Gas, le gustaba más tocar en las Cotxeres de Sants porque tienen algo de barrio. Hoy actuará para el Barnasants, el festival de la Canción de Autor, y llega con un catarro considerable... Sin embargo, a este decano se le notan las tablas y apenas la tos durante la hora larga de concierto en el que no faltan clásicos como Un burdo rumor o No todo va a ser follar. El local lleno y contento y reído. Antes podemos robarle unos minutos entre preguntas y fotos a este cantautor que como buen clásico de la generación de Sabina se moja ante la política y la cultura.

¿Qué va de Valle de lágrimas a Las diez de últimas?Valle de lágrimasLas diez de últimas

Pues creo que 34 años. Cuando grabé mi primer disco, Valle de lágrimas, todas las canciones hacía tiempo que las tenía hechas, en cambio en Las diez de últimas casi no las tenía hasta que las grabé. Aquel primer disco no lo escucho nunca porque ya sé cómo cantaba entonces. En cambio Las diez de últimas está muy 'apañao'. Durante todo este tiempo he aprendido a cantar mucho mejor.

¿Y el Sr. Krahe ha cambiado mucho desde entonces?

A la fuerza, se cambia por la fuerza del tiempo. Va pasando y cambias, ¿cuánto? No lo sé. Seguramente debo ser muy parecido a como era, aunque ahora soy abuelo... ¡quién me iba a decir a mi que iba a ser abuelo! Son cosas que también se convierten en nuevos temas para cantar.

¿Los cantautores actuales sobre todo cuentan historias o son muy líricos?... ¿Quién viene pisando fuerte?

No estoy muy enterado, apenas escucho música. Sin embargo, el tipo de cosa fuerte como la reivindicación social lo escriben hoy día sobre todo los raperos, no tanto los cantautores. En cuanto a quien tomará el testigo de nosotros, los cantautores tomarán el testigo sin más, sin pedir permiso ni nada. Será así. Y además será de alguno que no conozco.

¿Cómo ves lo de Wert con las clases de religión con 'catequesis' incluida?

Pasajeras, muy pasajeras. No va a durar, como no va a durar Wert ni sus políticas. Todo esto está en precario hasta que haya un nuevo orden que supongo que será en el año dieciséis.

¿El nuevo orden es, por ejemplo, la nueva formación Podemos?

Por ejemplo. Desde luego influirá, opinará en el Parlamento y se tendrá que tomar en cuenta lo que Podemos diga. La aparición de esta formación era lo que mucha gente estaba esperando y ha surgido. Ahí están y lo veo la mar de lógico y la mar de beneficioso. Estamos hartos de populismos, que eso es el PP y el PSOE. Son populistas por las promesas que hacen, que no tienen nada de contenido. De algún lado tienen que venir y pueden ser de Podemos o de Ciudadanos. Los que estaban hasta ahora verán reducidos sus escaños y tendrán que discutir. Viene un nuevo orden.

¿Y el nuevo orden cambiará cosas de una Cultura tremendamente castigada desde la Administración?

Como empeorar no puede, eso se notará. Habrá muchas mejoras.

Entonces, la inspiración a tope con la crisis y la corrupción... hay un surtido compendio de temas.

Sí, pero no quiero dedicarles temas porque son temas de actualidad. La canción me tiene que venir por otras vías: me viene o no me viene. Es más lógico que si se me ocurre una frase que yo considere muy interesante sobre la corrupción, entonces sí me anime. Sólo porque hay corrupción no le voy ha hacer un tema, eso lo puede hacer cualquiera. Hay que meterse con ella de alguna manera que tenga interés, que destaque la formulación y eso no es tan fácil. Aunque se pone uno a darle vueltas y vueltas y acaba por encontrarlo... pero no sé si estoy con ganas de darle tantas vueltas a algo que no me apetece nada. Prefiero darle vueltas a una aventura con una mujer, que eso siempre me apetece.

¿Las mujeres han cambiado, siguen siendo un Valle de lágrimas?Valle de lágrimas

No han cambiado nada... o, vaya, están algo mayores. Las jóvenes que aparecen ya no son para mi. Estoy resignado, les haré canciones.

Con Charlie Hebdo se plantea de nuevo el límite de la libertad de expresión del arte... A ti te juzgaron por 'escarnio' de la religión.

No debe haber límite por el contenido de lo que se dice y menos en estos asuntos de religión, que todo es más que opinable. Si lo hubiera debería ser de otro tipo. Lo que todavía no entiendo es porqué a mi me juzgaron. Por suerte me absolvieron, que si me llega a tocar alguno de los jueces que hay ahora... ¡ves tú a saber!

¿Se puede ganar uno la vida cantando?

Yo me la gano cantando, yo y otros muchos. Y luego hay otros muchos que cantan que no se la ganan.

¿Ayuda el 21% de IVA?

Todo perjudica, qué duda cabe. Pero eso también es de las cosas que se van a quitar cuando llegue el año 16.

¿Con las nuevas tecnologías hay que volver al concierto en directo?

¡Hombre, el concierto en directo no se puede dejar! Si es por discos, nadie se gana la vida con ellos, porque piratear está permitido y se piratea todo. No sólo está permitido, está organizado. ¿Para que sirve el ADSL? Sirve para descargarse música. Y eso lo tiene Telefónica. En todo el pirateo, Telefónica gana, los que tienen los derechos de autor, pierden. Es el Gobierno el que tendría que decirle a Telefónica que tiene que dar el 'X' por ciento de lo que gana, como un canon, o poner realmente los medios de prohibir eso que está prohibido. La SGAE no tiene nada que hacer frente a esta empresa que gana miles y miles de millones.

¿El directo en el Café Central de Madrid que sacaste en 2014 es un punto y aparte, un punto y seguido, una coma?

Las diez de últimas sí que era un punto, hice las canciones para ese disco expresamente. Pero el directo de MAdrid era simplemente un concierto que se dio y se grabó, no me costó ningún trabajo hacerlo. Tampoco era una antología, sino lo habría pensado de otra manera; era únicamente uno de los siete conciertos que di ese mes.

¿Qué proyectos quieres sumar a tus siete décadas?

No tengo proyectos de ningún tipo. Si acaso, trabajar menos. Sí me gustaría dedicarme un poco más a escribir canciones, que lo tengo un poco abandonado. Desde el verano pasado que no he cogido ni el blog ni la guitarra por pereza, desde luego, pues la inspiración viene si me pongo. En fin, lo que me apetece es que llegue el verano, no hacer nada y entonces sí meterme.

Javier Krahe (Madrid, 1944) acostumbra a venir un par de veces al año a Barcelona y, aunque considera que es mejor la sala Luz de Gas, le gustaba más tocar en las Cotxeres de Sants porque tienen algo de barrio. Hoy actuará para el Barnasants, el festival de la Canción de Autor, y llega con un catarro considerable... Sin embargo, a este decano se le notan las tablas y apenas la tos durante la hora larga de concierto en el que no faltan clásicos como Un burdo rumor o No todo va a ser follar. El local lleno y contento y reído. Antes podemos robarle unos minutos entre preguntas y fotos a este cantautor que como buen clásico de la generación de Sabina se moja ante la política y la cultura.

¿Qué va de Valle de lágrimas a Las diez de últimas?Valle de lágrimasLas diez de últimas