A falta de diez días para que se vote en el pleno, todo apunta a que el Gobierno de Ada Colau se quedará esta legislatura sin uno de sus proyectos estrella: la unión de los dos tramos del tranvía por la Diagonal. ERC ha anunciado que votará 'no' al proyecto que se somete a votación el 23 de marzo, con lo que Barcelona en Comú tiene por ahora solo el apoyo del PSC, lejos de los 21 concejales necesarios.
El Ayuntamiento de Barcelona ya rebajó este lunes la unión total del tranvía a solo una parte –de plaza Glòries a Verdaguer– para convencer a ERC, así como un protocolo con la Autoridad Metropolitana del Transporte (ATM), de quien depende en realidad la infraestructura, que preveía una revisión de la tarifa técnica (lo que cobra la empresa por cada viaje de usuario).
Pero ERC se ha plantado. El concejal Alfred Bosch ha argumentado en una entrevista en el diario Ara que su 'no' por la falta de claridad del plan de gestión que prevé Colau para el tranvía. Cree que el Ayuntamiento no debería adelantar los 200 millones que cuesta la obra teniendo en cuenta que los beneficios recaerán en la empresa privada que gestiona este transporte desde 2004.
Por su parte, en Barcelona en Comú creen que la negativa de los republicanos responde a la cercanía de las elecciones en 2019. Recuerdan que ERC recoge en su programa electoral el tramo de tranvía que se somete a votación este viernes, y añaden que si no rescatan la concesión de la gestión privada del tranvía, vigente hasta 2032, es porque costaría entre 220 y 400 millones de euros.