Pedro Sánchez quiere a Miquel Iceta como presidente del Senado. Es todo un gesto del líder socialista hacia el electorado catalán al situar al frente de la Cámara territorial al primer secretario del PSC, un defensor del federalismo. Pero el camino no es fácil debido a que Iceta no forma parte del Senado y que, para serlo, necesita el aval del Parlament para convertirse en senador de designación autonómica. La Junta de Portavoces ha acordado este miércoles que lo decidirá antes de la sesión constitutiva de la Cámara Alta, pero no mañana mismo como quería el PSC, sino el próximo miércoles 15 de mayo.
La Junta de Portavoces no ha compartido la necesidad de introducir tanta urgencia en los plazos parlamentarios. En especial los independentistas han cargado contra “las formas” con las que el PSC ha llevado a cabo esta maniobra, intentando solucionar todo el itinerario en apenas 24 horas. “Entendemos que ya tienen los apoyos necesarios para sacarlo adelante, porque a nosotros nadie nos ha dicho nada”, se quejaba el portavoz de ERC, Sergi Sabrià.
Fuentes del PSC achacan la premura a un problema de “plazos”. La designación autonómica de parlamentarios se realiza en votaciones. Hasta el 21 de mayo, que es la fecha prevista para la constitución de las Cortes en la que se eligen los miembros de las mesas del Congreso y el Senado, hay solo un pleno, que se celebra esta semana. De lo contrario, debería dejarse para después de la constitución del Senado, o bien celebrarse un pleno específico entre ambas fechas. Esta última es la solución que ha obtenido más apoyos.
El acuerdo, por tanto, es votar la semana que viene sobre la designación de Iceta como senador en sustitución al expresident de la Generalitat José Montilla, que ha presentado este mismo miércoles su dimisión. Pero esto no significa ni mucho menos que el primer secretario de los socialistas tenga allanado el camino hacia la presidencia del Senado. Aunque por buen uso parlamentario los grupos suelen permitir que los partidos renueven sus senadores sin intromisiones, en este caso la premura ha enfadado a prácticamente todos los grupos, que podrían castigar al socialista.
“Así no se hacen las cosas y no es manera de tomar decisiones. Lo hemos sabido a través de la prensa y no podemos supeditar las instituciones catalanas a las decisiones respecto a sus sillas que tome el PSOE”, ha reprochado Sabrià. La diputada de JxCat, Gemma Geis, era aún más clara cuando recordaba “las últimas decisiones del Senado respecto a este Parlament en las que el señor Iceta tuvo un papel destacado”, en referencia a la aplicación del artículo 155.
Sánchez le ofreció a Iceta presidir el Senado este martes. No obstante, fuentes parlamentarias socialistas aseguran que no ha sido una decisión premeditada y que desde hace tiempo se barajaban distintas opciones. En el PSOE se muestran confiados en sortear la complicación del nombramiento como senador del dirigente catalán para seguir con su plan de situarle al frente de la Cámara territorial. “Todo es posible”, dicen fuentes próximas a Iceta. Una opción sería que el día 21 de mayo, el Senado eligiera otro presidente y que, más adelante, renunciara para que la Cámara Alta elija a Iceta. El PSOE tiene mayoría absoluta en el Senado.
Fuentes parlamentarias indican, además, que no es seguro que los trámites necesarios para nombrar a Iceta lleguen a realizarse antes del próximo miércoles. Entre otras cosas, estas fuentes considerar que el candidato a senador debe comparecer ante el Parlament, según lo dispuesto en el reglamento del Parlament. Además, indican, debe reunirse la comisión del estatuto del diputado y acreditarse la dimisión de Montilla, pues no está claro que un senador pueda dimitir durante el periodo electoral en el que el Senado está disuelto.