La Fiscalía de Barcelona ya tiene sobre la mesa la denuncia del major de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, por la Operación Catalunya. Según han informado fuentes jurídicas, el Ministerio Público analiza si abre diligencias únicamente por la denuncia del major o si la envía a la Fiscalía Superior de Catalunya, que ya investiga las maniobras de la brigada política del PP contra el exfiscal superior catalán, Martín Rodríguez Sol.
El de Trapero es uno de los nombres de funcionarios, políticos y empresarios que, en base a rumores sin contrastar y falsedades, aparecen en hasta 34 investigaciones que la Dirección Adjunta de la Policía recopiló en un documento que manejó en su despacho el entonces ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y que fue desvelado el pasado mes de enero en una investigación conjunta de elDiario.es y La Vanguardia.
Trapero ya anunció entonces su intención, ahora concretada en una denuncia de unas 50 páginas, de llevar ante la Justicia la “persecución injusta” hacia su persona realizada por “individuos que no tenían habilitación legal para hacerlo” y que solo tenía por objetivo su “descrédito y neutralización”. El major hace hincapié en que el uso de fondos reservados agrava la trama.
La decisión de la Fiscalía sobre si unifica la denuncia del major a las diligencias recientemente abiertas por las maniobras contra el exfiscal superior catalán determinará la creación de una única gran investigación sobre la Operación Catalunya o si, por contra, se realiza de forma separada.
En el marco de las diligencias sobre las maniobras contra Rodríguez Sol, han apuntado las mismas fuentes, jurídicas, la Fiscalía Superior ya ha encargado las primeras diligencias a la Policía, consistentes en corroborar la veracidad del documento policial que enfocó hacia el fiscal en base a rumores y noticias sin contrastar y saber “la autoridad policial que dirigió las pesquisas y la identidad de los funcionarios o autoridades a los que se comunicó los resultados” de las mismas.
En cualquier caso, es la Fiscalía la que asume el mando de las pesquisas sobre la Operación Catalunya después de que en los últimos años varios jueces hayan rechazado las denuncias de las víctimas.
Cabe recordar que, en el caso de Trapero, el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón rechazó abrir una causa después de recibir un informe de los Mossos d'Esquadra que exponía los audios del comisario jubilado José Manuel Villarejo en los que se intentaba implicar a Trapero en un caso de presunto narcotráfico, el conocido como caso Macedonia. La causa, en la que Trapero nunca llegó a estar imputado pero que provocó un enfrentamiento entre el major y el juez instructor, Joaquín Aguirre, terminó con la absolución de todos los acusados.
La sentencia de la Audiencia de Barcelona que absolvió a los acusados del caso Macedonia censuró la instrucción del juez Aguirre, anuló varios de los pinchazos telefónicos acordados y llegó a una conclusión rotunda: no hubo colaboración alguna de ningún agente de la policía autonómica con la presunta trama de narcotráfico liderada en realidad por un confidente policial habitual de los Mossos, Manuel G.C.