Renfe dejará de operar las líneas de cercanías de Lleida. El Govern ha aprobado este martes que el servicio cambie de manos y que sea la empresa pública Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) quien la gestione a partir del año 2024 dos líneas. El vicepresident Jordi Puigneró ha anunciado esta decisión en pleno debate sobre el traspaso total del servicio en el conjunto de Catalunya y después de la huelga de maquinistas que paralizó Rodalies a principios de mes. “Estamos demostrando nuestra voluntad de asumir la totalidad de las Rodalies de Catalunya, porque cuando el servicio lo presta el Estado, es muy mejorable”, ha asegurado Puigneró.
La línea que pasará al control directo del Govern es la que une la ciudad de Lleida con Cervera y Manresa, que ahora se convertirán en dos líneas, la RL3 y RL4, integrándose en el sistema que ya gestiona FGC, la mayor parte en el Área Metropolitana de Catalunya pero también una en la provincia de Lleida, entre esta ciudad y la Pobla de Segur, que fue traspasada en 2006. “Técnicamente estamos transformando una línea regional en un sistema de Rodalies”, ha explicado Puigneró, que ha indicado que con la decisión la Generalitat asume un 10% de los servicios de cercanías de Catalunya con la voluntad de acabar gestionando el servicio completo. “Esta será la legislatura del traspaso y mejora de las Rodalies”, ha dicho.
El Govern se ha comprometido además a que, con la nueva gestión, habrá una mejora visible en el servicio. En concreto el vicepresident ha indicado que habrá una mejora de frecuencias, que se doblarán respecto a las actuales, se mejorará la puntualidad y se renovarán los trenes para modernizarlos. De entrada en la reunión de este martes, el Ejecutivo catalán ha aprobado aportar 65 millones de euros iniciales. Según la proyección del Govern, la línea entre Lleida y Manresa puede alcanzar los 450.000 pasajeros en cuatro años.
La Generalitat asegura que tomar el servicio de Lleida es “asumible” en este momento y no ve problema a nivel competencial, ya que se trata de un cambio de operador. “Esta es una competencia que tenemos ya”, ha dicho. Más allá de esto, Puigneró ha recordado que su objetivo es acabar asumiendo el servicio completo, pero esto debe ser fruto de un acuerdo. “Sin la financiación y el traspaso de la infraestructura, no es posible”, ha indicado el máximo responsable de la movilidad sobre las Rodalies de Barcelona. “El servicio de FGC en Lleida es el modelo que queremos seguir por el resto de Rodalies de Catalunya”, ha apuntado.
Respecto a los trabajadores que actualmente prestan servicio en Renfe, el vicepresident ha asegurado que “nadie debe preocuparse por su puesto de trabajo”, porque el Govern dará la opción a los empleados de Renfe de que se incorporen a FGC o, bien, que se mantengan en la operadora del Estado en otra destinación.