Un juzgado de Vilafranca del Penedès (Barcelona) investiga por fraude fiscal a Basic Devices, la misteriosa empresa sin actividad que vendió material sanitario al Govern catalán en diversos contratos que sumaron 35 millones de euros.
La Fiscalía presentó una querella ante este juzgado contra los administradores de esta compañía al considerar que defraudaron a Hacienda 255.000 euros, según consta en la querella avanzada por El Periódico y a la que ha tenido acceso elDiario.es.
Los contratos con esta empresa, cerrados durante lo más profundo de la pandemia, ya fueron investigados por la Oficina Antifrau de Catalunya, que concluyó que el negocio se hizo sin la debida cobertura legal y que el Instituto Català de la Salut (ICS), dependiente del Govern, avanzó de “manera temeraria” el dinero a una empresa que, según recuerda la Fiscalía en su querella, no tenía actividad conocida en el sector ni empleados.
Fue precisamente la Oficina Antifrau la que remitió toda la documentación a Hacienda tras apreciar que había “riesgo tributario” en la operación, para que el fisco valorara “el alcance, la repercusión y los efectos de la aplicación de la normativa tributaria y aduanera”.
El Ministerio Público considera que esta empresa, que importaba el material desde China, no reflejó debidamente los importes contabilizados en la declaración trimestral del IVA. Tras la presentación de la querella, la empresa ha abonado al fisco la cantidad reclamada.
Este periódico reveló en marzo de 2022 como la empresa desplegó presuntamente, durante la segunda mitad de 2021, decenas de páginas webs y cuentas falsas en redes sociales con los nombres de sus administradores que ofrecían información ficticia sobre los empresarios que estaban detrás de esa sociedad, en cuya sede no había actividad alguna.
Más adelante El Confidencial publicó que uno de los administradores de esta sociedad presionó a la mujer del entonces president de la Generalitat, Quim Torra, para que el ICS tirara adelante el contrato con su empresa.