El Juzgado Contencioso Administrativo número 10 de Barcelona ha anulado la declaración institucional que el Pleno Municipal aprobó ahora hace un año por el cual se suspendían relaciones entre el consistorio barcelonés y el estado de Israel hasta que hubiera un alto al fuego definitivo en Gaza.
La decisión fue impugnada por Acción y Comunicación sobre Oriente Medio, una organización que consideró que dicha resolución vulneraba “la libertad ideológica”. La justicia ha estimado el recurso de esta entidad y anula la resolución, que fue aprobada con los votos del PSC, Comuns y ERC. El Ayuntamiento ya ha asegurado que recurrirá la decisión del juzgado.
La sentencia, a la cual ha tenido acceso elDiario.es, considera que hay diversas declaraciones en la resolución municipal que son “contrarias a derecho”. Asegura también que los acuerdos del Ayuntamiento “no son una mera decisión inocua o simbólica” y sostiene que el consistorio afirma “sin motivación alguna” que Israel está ocupando ilegalmente territorios palestinos.
Eso, para el Juzgado, envía un “mensaje claramente negativo, de alejamiento y hostilidad contra Israel y sus ciudadanos, a quienes parece considerarse como parte culpable”. Asimismo, considera que el consistorio no dispone de competencias para adoptar acuerdos sobre política internacional ni para modificar el régimen jurídico de la contratación pública.
Esta última afirmación hace referencia a un compromiso que figuraba en la resolución, por la cual el Ayuntamiento se comprometía a elaborar una cláusula que prohibiría contratar cualquier empresa que colaborara con el genocidio en Gaza.
Esta resolución, que el Pleno votó el 23 de noviembre de 2023, fue impulsada por los Comuns, y fue el último episodio de una polémica que epezó algunos meses antes. En febrero de 2023 la entonces alcaldesa Ada Colau ya decidió suspender relaciones con Israel, así como el hermanamiento con Tel-Aviv. Pero lo hizo de manera unilateral.
Al no tener asegurados los votos necesarios para hacerlo, Colau optó por el decreto de alcaldía. Este gesto, que si bien contó con la aprobación de diversas entidades de la sociedad civil, despertó rechazo entre diversos grupos municipales.
De hecho, una de las primeras cosas que hizo Collboni como alcalde fue reestablecer las relaciones y el hermanamiento con Israel. Lo hizo el 1 de septiembre, pero un mes después se darían los hechos del 7 de octubre, que dieron inicio a la guerra en Gaza. Eso hizo cambiar de opinión al consistorio, que decidió suspender relaciones de nuevo el 23 de noviembre. A diferencia de la primera vez, en esa ocasión la decisión sí fue sometida a votación.
La Acción y Comunicación sobre Oriente Medio no es la primera asociación que decide impugnar la resolución del consistorio de anular vínculos. Ya lo intentó la Asociación Instituto Barcelona de Diálogo con Israel cuando la iniciativa fue de Colau. Pero en ese caso, la justicia desestimó el recurso.