La plataforma de Manuel Valls para concurrir a las elecciones se llamará Barcelona Capital Europea. El exprimer ministro francés ha anunciado que este será el nombre para el proyecto con el que quiere “agrupar a todos los barceloneses”, y ha precisado que no será hasta noviembre cuando empiece a concretar los nombres que le acompañarán en la lista electoral, los ejes de su programa o el presupuesto de la campaña.
Valls ha ofrecido una rueda de prensa el día después de confirmar su voluntad de concurrir a las elecciones para ser alcalde de Barcelona. El El agradeció que se vaya a sumar Ciudadanos, y dedicó su discurso a prometer mejorar los indicadores sociales, económicos y culturales de la ciudad y a combatir la inseguridad y el incivismo.
Este miércoles, Valls se ha querido presentar como el candidato de la “moderación”, con vocación de captar el voto tanto de gente de izquierdas como de derechas. Ha vuelto a insistir en este sentido que espera sumar formaciones como el PP y el PSC a su candidatura, aunque ha reconocido que a día de hoy ninguno de los dos tiene previsto hacerlo.
El político francés, que dejará su acta de diputado en la Asamblea Francesa la próxima semana, también ha insistido en que hay que evitar que los independentistas gobiernen Barcelona para convertirla en la “capital imaginaria de la República”. Ha vuelto a lanzar un dardo así a Ada Colau, a quien ha atribuido una “equidistancia” que no permite resolver la encrucijada que supone el procés.
Valls no ha dudado en entrar esta misma semana en la pugna política para responder a la alcaldesa de Barcelona, que le ha calificado de “candidato de las élites”. Ha asegurado que no quiere “bajar al nivel de insultos” y se ha referido a las pensiones de su madre y su hermana para negar que sea el elegido de las clases altas. “¿Qué es ser rico? ¿Ganar 500 euros o 600 al mes? ¡Eso es mi familia!”, se ha exclamado.
En este sentido, ha asegurado “respetar” el trabajo Colau como alcaldesa pese a las discrepancias, pero eso no le ha impedido dirigirle una última crítica tirando de experiencia política: “Gestionar una ciudad cuando no estás preparado no es fácil”.
Acabar con los manteros en el espacio público
Uno de las políticas a las que más tiempo ha dedicado Valls en sus intervenciones ha sido la inseguridad y el incivismo, que considera “problemas serios” en Barcelona. Se ha mostrado convencido de que en los últimos años se ha deteriorado la imagen de la ciudad y la vida de sus vecinos y se ha referido en concreto a la presencia de vendedores ambulante. “¿Hay un problema con los manteros? Sí. ¿Hay ocupación del espacio público? Vaya a Plaza Catalunya o al Puerto”, ha respondido a una periodista.
En este ámbito ha añadido que no pretende abordar la problemática de losa manteros “de forma brutal”, pero que sí quiere resolverlo. Y acto seguido ha lamentado cómo afectan a la marca barcelonesa imágenes como la del turista golpeado por un mantero. “Ese turista americano hispanohablante al que pegaron con violencia increíble este verano, esta realidad de un hombre que ha sufrido ha hecho la vuelta al mundo”, ha expresado, sin hacer mención a la versión de los vendedores según la cual la pelea la habría empezado él.
Consciente de su reputación de mano dura contra la inmigración, Valls ha querido resaltar que “Barcelona es una ciudad acogedora y tiene que seguir siéndolo siempre pero el espacio público, como la vivienda o el turismo, deben resolverse con gestión”. Ha repetido en este sentido que no pretende contraponer seguridad a lucha contra la pobreza, “porque es la gente más humilde la que vive problemas de inseguridad”.