El bloque constitucionalista, más cerca de recuperar el ayuntamiento de Badalona

Badalona puede cambiar de color a un año de las elecciones municipales. La alcaldesa Dolors Sabater, al frente de una coalición de Gobierno que incluye a Guanyem En Comú –compuesta por CUP y Podem–, ICV y ERC, ha perdido este lunes la cuestión de confianza con la que pretendía aprobar los presupuestos anuales. El PSC ha retirado el apoyo que venía dándoles desde 2015, dejando al gobierno contra las cuerdas.

El bloque formado por PSC, PP y Ciudadanos tiene mayoría en el consistorio, aunque hasta ahora nunca la había llegado a usar para cuestionar la continuidad del frente de izquierdas que gobierna la tercera ciudad de Catalunya desde 2015. Este lunes, sin embargo, el PSC ha mantenido la posición contraria a los presupuestos, con el argumento de que el equipo de Sabater usa el ayuntamiento para fines independentistas.

Según ha manifestado el portavoz badalonés del PSC, Àlex Pastor, su grupo iniciará conversaciones con el PP y Ciudadanos para buscar una mayoría de gobierno alternativa. De un modo parecido se ha expresado el líder del PP catalán y concejal en la ciudad, Xavier García Albiol, que ha reconocido tener ahora la “oportunidad de presentar una moción de censura a la CUP”. 

Después de votar en contra de la cuestión de confianza a la alcaldesa, los constitucionalistas tienen un mes para presentar un candidato alternativo.

Hasta ahora los socialistas venían apoyando el gobierno de Guanyem Badalona En Comú como mal menor para desalojar del consistorio a Albiol, que lideró la anterior legislatura municipal. El líder del PP catalán había puesto siempre como requisito ante el PSC volver a la alcaldía si se articulaba cualquier mayoría alternativa, un requisito que el grupo socialista espera que decaiga ahora, dado el contexto político. Con este movimiento, el PSC tiene a tiro volver a la alcaldía de Badalona, 7 años después de que el PP les desalojara.

A falta de mayoría suficiente para los presupuestos municipales de este año, el equipo de gobierno optó por una aprobación automática mediante la moción de confianza, algo que ha dado buenos resultados a Ada Colau en Barcelona. Desde Guanyem En Comú ya preveían el voto contrario del PSC, pero son optimistas respecto a las negociaciones que se abrirán ahora en el bloque constitucionalista. Según consideran, pactar con el PP de Albiol es un precio demasiado alto para el PSC, sobre todo cuando en un año deberán volver a pasar el examen de las urnas.