La protesta convocada por los CDR contra la policía ha acabado con enfrentamientos de los manifestantes con los agentes, cargas y barricadas en el centro de Barcelona. Unos incidentes que no se habían visto durante los últimos días, pero que han sido de menor entidad a los ocurridos la semana pasada. Varios miles de personas se han concentrado ante la Jefatura de la Policía Nacional en Barcelona, convocados por los CDR, tras la manifestación multitudinaria y festiva que ha tenido lugar en la calle Marina –esta segunda protesta ha sido convocada por la ANC, Òmnium Cultural y otra decena de entidades.
Las cargas policiales y el lanzamiento de objetos a los agentes han marcado el acto de los CDR. Después despejar la zona de la Jefatura, donde se han producido las primeras cargas, los Mossos han acabado entrando también a plaza Urquinaona, donde los manifestantes se habían replegado. Los agentes han disparando Foam de forma continuada para posteriormente acceder con las furgonetas mediante la técnica del carrusel, conducción muy rápida hacia los manifestantes para dispersarlos.
A partir de ese momento, los manifestantes han quedado repartidos por las calles del Eixample derecha, donde han apilado basura y material para hacer barricadas y han prendido fuego a algunas de ellas. Los Mossos han intervenido entonces, de nuevo mediante carruseles y con disparos de material antidisturbios desde dentro de los vehículos, algunos de los cuales conducían con las puertas abiertas o entreabiertas.
Los servicios de emergencias médicas han atendido a lo largo de la noche a 46 personas, ninguna de ellas de carácter grave. Si bien dos personas permanecen hospitalizadas, que se suman a las cuatro que siguen hospitalizadas de los disturbios de la semana pasada, dos de ellos graves. 44 de los heridos de la noche del sábado fueron atendidos en Barcelona y 2, en Mataro. Un fotógrafo de la agencia Associated Press, acreditado como prensa, ha recibido un golpe de porra de un mosso en la cara.
Entre los heridos por los disturbios de la noche del sábado en Barcelona figuran al menos tres agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) del Cuerpo Nacional de Policía, informaron a Efe fuentes policiales. Desde Mossos d'Esquadra informaron de que también hay una 25 agentes de este cuerpo heridos.
Según han informado fuentes policiales a este diario, un agente de los Mossos resultó herido al caer de un vehículo policial y fue trasladado a un hospital, del que ya ha sido dado de alta. Aunque en un principio desde la policía catalana se ha afirmado que se trataba de un herido grave, los servicios médicos no lo han computado como tal, al estar afectado de una luxación de rodilla y policontusiones. La Policía Nacional ha detenido, además, a tres personas tras las cargas en la Vía Laietana.
El grupo de manifestantes se ha concentrado primero en la Plaza de Urquinaona y ha comenzado a desplazarse poco después de las 19 horas hacia la Jefatura de la Policía Nacional, en la aledaña Vía Laietana. Efectivos de la Policía Nacional y los Mossos d'Esquadra han formado un importante dispositivo que ha blindado el edificio.
Sobre las 8 de la tarde, una columna de furgonetas de la Policía Nacional ha bajado por Vía Laietana, con agentes abriendo paso entre miles de personas. Se han producido algunos lanzamientos de objetos, momentos de tensión y acelerones. Finalmente, las furgonetas han entrado por detrás de la Jefatura, y una docena de policías han quedado aislados.
En aquel momento han aumentado considerablemente los lanzamientos de objetos. La mayoría eran pelotas de goma, recogidas por los manifestantes del propio arsenal lanzado por la Policía días antes. La línea policial finalmente ha asegurado la calle Magdalenes y los aledaños de la comisaría.
La primera carga policial se ha producido poco después de las 21 horas en la confluencia entre la calle Magdalenes y Compal. Una columna de furgones de los Mossos ha entrado por el lateral para reforzar el cordón de la Policía Nacional. Cuando los Mossos han llegado hasta la masa de manifestantes, estos han intensificado el lanzamiento de pelotas, pero también algunas botellas de vidrio y piedras. Los agentes han salido de los vehículos y ha sido, entonces, cuando han realizado cargas contra algunas personas que se encontraban en la primera línea.
Media hora más tarde, los Mossos y Policía Nacional han despejado todo el área frontal de la Jefatura, apartando a los manifestantes y colocando una quincena de furgonetas en Vía Laietana. Se han producido cargas y carreras por la zona del Gòtic, y buena parte de los manifestantes han sido replegados hacia Urquinaona.
Después, los agentes han disparado balas de foam y han cargado fuertemente contra los manifestantes. En la misma plaza Urquinaona, los asistentes a la protesta han lanzado pirotecnia. La protesta se ha trasladado hasta el Passeig de Gràcia y los manifestantes han acabado dispersados por varios puntos de la ciudad, donde ha habido fuegos y barricadas.
Epicentro de protestas
La Jefatura de la Policía Nacional ha sido epicentro de las protestas y disturbios ocurridos durante la última semana en Barcelona. Los manifestantes se han concentrado cerca del edificio para criticar la actuación policial en las convocatorias contra la sentencia del procés. En los distintos días de protestas, han cantado consignas como 'Fuera las fuerzas de ocupación' o 'Este edificio será una biblioteca'.
Pero también ha habido gestos de apoyo a los agentes: durante el domingo y el lunes pasados, ciudadanos anónimos dejaron flores y algún que otro cruasán. Incluso los políticos han aprovechado la situación y, en plena precampaña, han visitado la comisaría. El presidente en funciones Pedro Sánchez (PSOE) fue el único que accedió al edificio, mientras que Pablo Casado (PP) y Lorena Roldán (Ciudadanos) se tuvieron que conformar con hablar con los agentes desde la calle.