La exdiputada de la CUP Mireia Boya viajará el próximo miércoles a Madrid con el objetivo de presentarse voluntariamente a declarar ante el Tribunal Supremo, tal y como la ha citado el juez Pablo Llarena. Así lo ha anunciado la propia Boya este lunes en una rueda de prensa ofrecida en Lleida, despejando una de las incógnitas sobre cómo actuaría ante esta causa la CUP, cuyos miembros se han destacado por no presentarse voluntariamente ante los tribunales en otros procesos.
Según ha explicado la exdiputada de la Vall d'Aran, pretende declarar “de frente” y defendiendo sus ideas, y por lo tanto reivindicar el referéndum del 1 de octubre. “Hemos visto que no sirve de nada abjurar de la ideología propia para evitar la prisión”, ha asegurado, “hicimos un referéndum y lo ganamos. Reivindiquémoslo”.
La exdiputada ha asegurado ser consciente de las probabilidades de no volver a casa tras la declaración, tal y como ha ocurrido con la mayoría de los políticos independentistas que han declarado a raíz de esta causa. Pese a esto se ha mostrado convencida de su línea de defensa: “Si entro en prisión sólo saldré cuando tengamos la república”, ha considerado.
El objetivo de la anticapitalista es plantear una defensa política ante la causa por rebelión y sedición que el Supremo instruye contra ella, al entender que se trata de unas acusaciones políticas que pretende “extender el miedo” mediante la represión. Es por esto que Boya y su equipo jurídico han mostrado la posibilidad de acudir a la justicia internacional.
“La causa del Supremo ha sido construida sobre un atestado de la Guardia Civil poco fundamentado, parcial e interesado, que construye un relato de violencia que no existió”, ha asegurado la exdiputada. A juicio del equipo jurídico de los anticapitalistas, la causa carece de garantías procesales, por lo que hablan de “derecho penal del enemigo”.
En la rueda de prensa Boya ha sido acompañada por los actuales diputados Natalia Sànchez y Vidal Aragonés, además de por su abogado. No ha comparecido la exdiputada Anna Gabriel, que declarará una semana después de que lo haga Boya, y por tanto las dudas sobre cuál será la forma de afrontar el juicio en su caso no han sido despejadas.
Mireia Boya será la primera en declarar del grupo de personas recientemente investigadas, entre las cuales además de las dos exdiputadas de la CUP están la secretaria general de ERC, Marta Rovira, el expresident de la Generalitat Artur Mas o la coordinadora general del PDeCAT, Marta Pascal.