A menos de medio año para que acabe el plazo –uno más– autoimpuesto por el Govern para celebrar un referéndum de independencia, el Ejecutivo catalán no tiene intención de anunciar por el momento la fecha concreta en la que pretende celebrarlo ni la pregunta que se formulará.
El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha rechazado este miércoles concretar estas cuestiones más allá de que sea “una pregunta clara y binaria”, pese a la petición directa de la CUP, que este martes comenzó una campaña de presión para ello repartiendo papeletas del referéndum en las bocas del metro. Mientras, en los micrófonos de Rac1, el vicepresident Oriol Junqueras lanzaba la pelota hacia adelante asegurando que el referéndum se convocará “en un par de meses”.
El Govern quiere esperar a que el Pacte Nacional por el Referéndum, la entidad que agrupa a entidades políticas, sociales y sindicales en torno a la idea del referéndum pactado, pueda culminar su campaña de recogida de apoyos para persuadir al Gobierno de Rajoy a que se siente a negociar el referéndum. En este sentido, Puigdemont ha asegurado que su Govern quiere recorrer la vía pactada “hasta el final”.
“Llegará el momento de fijar fecha y pregunta, y debe ser mediante un acuerdo amplio, no solo de la decisión del Gobierno o del capricho del president”, ha asegurado Puigdemont, llamando al pacto entre el conjunto de “los actores implicados en el derecho a decidir”. Por su parte, la diputada de la CUP, Anna Gabriel, ha considerado que, habiendo sido el Parlament quien encargó al Govern comenzar los preparativos del referéndum, es “de sentido común” que sea esta misma cámara la que concrete la fecha y la pregunta.
Tal como ha mostrado en otras ocasiones, los planes del Govern respecto al referéndum no pasan por mutar la vía pactada, iniciada con el Pacte Nacional, por la vía unilateral, sino avanzar en los dos carriles paralelamente. Por ello, Puigdemont no quiere interferir en la tarea del Pacte Nacional, del que ha asegurado que “tiene camino por recorrer”. De hecho, el próximo 23 de abril, día de Sant Jordi, el Pacte ha activado un gran despliegue de recogida de firmas en favor del referéndum pactado, y en las últimas semanas ha abultado su agenda fuera de Catalunya.