Junts per Catalunya ha jugado su última carta para intentar hacer president a Carles Puigdemont sin desobedecer abiertamente al Tribunal Constitucional (TC). A menos de 24 horas del pleno de investidura, la lista del expresident ha pedido al TC que levante la prohibición de la investidura a distancia que decretó el sábado. Además, ha reclamado a los magistrados que lo decidan antes del pleno previsto para las 15:00h. El TC ha recogido el guante y ha anunciado que se reunirá mañana a las 13:00h.
En su escrito de alegaciones, JxCat solicita al TC que apruebe la “inmediata suspensión cautelar” de su decisión del sábado. Y que lo haga este mismo martes antes del pleno de investidura. La lista de Puigdemont alega que el auto del TC tiene “diferentes vicios de nulidad”. Por ejemplo, que veta la investidura a distancia como medida cautelar sin haber dicho antes si admite o no a trámite el recurso del Gobierno.
“El Tribunal Constitucional no tiene atribuciones para interpretar preventivamente el reglamento del Parlament de Catalunya”, añade JxCat, que tilda de “irregularidad” y de “clara improcedencia desde el punto de vista procesal” la imposición de medidas cautelares –prohibir la investidura a distancia– sin haberse pronunciado sobre la admisión del recurso.
Considera JxCat además que el TC se adelanta sobre el fondo de la cuestión (si Puigdemont puede ser candidato a la investidura o no), algo que “excede la finalidad de las medidas cautelares”. A juicio de la lista de JxCat, el Constitucional tenía que haber suspendido o avalado la propuesta de Puigdemont como candidato, pero no poner condiciones, como que fuera presencial y con permiso del juez.
“En particular, resulta de una arbitrariedad palmaria la sujeción a autorización judicial de la asistencia de un parlamentario a su propio debate de investidura como candidato a la presidencia”, abunda el escrito, que considera que el auto del TC del sábado “perturba gravemente el funcionamiento del sistema parlamentario”.
Y señala también JxCat la vía de la justicia europea al advertir que prohibir la investidura no presencial y el voto delegado de los exconsellers en Bruselas como medida cautelar podría considerarse un “trato discriminatorio” del TC hacia determinadas opciones políticas prohibido por el artículo 14 de la Convención Europea de Derechos Humanos.
Por todo ello, JxCat pide que el Alto Tribunal resuelva sus alegaciones este martes antes del pleno “en justa coherencia con la celeridad” del propio TC al reunirse el sábado para debatir sobre el recurso que el Gobierno le presentó el viernes.
El TC ha respondido poco después de la presentación de las alegaciones a la petición de JxCat. El Tribunal ha dado de plazo este martes a las 11:00h. para que el Parlament y la Abogacía del Estado presenten sus escritos en contra y a favor de admitir el recurso del Gobierno y dos horas después se reunirá para resolver las alegaciones de JxCat. El pleno está convocado para las 15:00h. Otra jornada no apta para cardíacos en la política catalana.