Entre las responsabilidades de la consellera de Enseñanza, Clara Ponsatí, está la apertura de los más de 2.000 colegios que el Govern pretende utilizar como puntos de votación este domingo. Se trata, en su mayoría, de centros que gestiona directamente su departamento, pese a lo cual un auto judicial ordenó este miércoles a la policía impedir su apertura. Ponsatí es optimista y considera que estas actuaciones no tendrán efecto por ser logísticamente imposibles.
¿Cuántos colegios electorales pretende abrir la consejería?
No sé el número exacto, porque no he estado en la logística detallada, pero que todo el mundo esté tranquilo porque se abrirán todos los que se tengan que abrir. Son unos 2.000.
¿Quién los abrirá?
Los representantes de la Administración. Es personal que la Administración ha reclutado para hacer el referéndum.
Si estas personas encuentran los colegios precintados, ¿qué deben hacer? ¿Romper precintos?
Yo no creo que esta situación ocurra. La orden de precintar los colegios es tan delirante que no se puede aplicar. Yo creo que eso de los precintos no tendrá efecto.
CCOO denunció el otro día que el Departament había pedido llaves a algunos directores, y que todavía le faltaban. ¿Es eso cierto?
No sé en qué se fundamenta esta acusación. Los servicios territoriales y el Consorcio de Barcelona tienen las llaves de los centros. Puede que les faltase alguna copia, desconozco cada caso concreto. Pero si se han pedido copias será porque las necesitan en general. Estas llaves se tienen por si se necesita hacer alguna actuación. Pero yo no tengo noticia de que haya habido ningún incidente en este sentido.
¿Pero tienen todas las llaves de los colegios? ¿Han pedido llaves últimamente?
Creo que las tenemos todas, sí. Que yo sepa, las tenemos todas. En cualquier caso, el tema de las llaves es un tema menor. Estos edificios son del Departament y se deben poner al servicio del pueblo de Catalunya. Si resulta que tienes que hacer una actuación y en ese momento no tienes la llave, buscas a un profesional que te ayude a resolver el problema. Son incidencias.
Uno de los temas más candentes es sobre la responsabilidad de los directores de centros. El delegado del Gobierno, Enric Millo, les escribió una carta donde les alertaba de posibles consecuencias penales si permitían que en sus centros se votase este domingo. ¿Cuál es su opinión sobre esto?
Esto no tiene absolutamente ninguna base jurídica. Absolutamente ninguna. Pero es que el Gobierno ahora mismo está actuando de forma insistente sin base jurídica. La carta del señor Millo, la interlocución de la Fiscalía, la orden de precintar centros a 100 metros a la redonda… No hay nada de eso que tenga ninguna base jurídica y, pese a eso, lo están haciendo.
Han decidido esta forma para jugar esta partida política, con la amenaza del uso de la fuerza y la amenaza del uso arbitrario de las instituciones y la justicia. Y ante eso es evidente que hay personas que les afecta y les da miedo. Es insólito y es totalmente rechazable y condenable en un Estado democrático. Ya hace tiempo que las instituciones del Estado han renunciado a comportarse con respeto a los derechos humanos. Ante eso, la única salida es demostrarles que el pueblo de Catalunya no lo acepta, e ir a votar. Dar una lección de dignidad democrática.
El argumento del Gobierno es que, como los directores son responsables del centro, también es su responsabilidad impedir, o al menos denunciar, el referéndum suspendido.
El delegado del Gobierno puede decir lo que quiera, pero no hay nada de lo que dice que esté fundamentado ni en la ley ni en los principios básicos de la democracia. Los directores de centro no tienen ninguna responsabilidad sobre el uso que el Departament haga de los centros de los que es titular. De ningún tipo, y mucho menos penal.
¿El Departament se hace cargo de todo lo que ocurra este domingo y asume la responsabilidad por lo que pueda pasar?
Sí, naturalmente. Pero es que no puedo imaginar qué juez podría iniciar acciones penales contra un director porque el domingo se vote en su centro. Me resulta un escenario más que inimaginable, sería surrealista.
El conseller de Sanitat tomó este miércoles el control de los consorcios públicos de cara al 1-O. Usted lo hizo en su momento con el Consorci d’Educació de Barcelona. ¿No ha necesitado hacerlo con más entes?
No, no. Y bueno, que tomé el control del Consorci es mucho decir. Yo soy la presidenta del Consorci. Y el Consorci no ha estado involucrado activamente en la logística del referéndum. De hecho esta logística la organiza el Govern, y no desde el departament d’Ensenyament.
Sobre el pacto al que se llegó entre el Govern y la alcaldesa Colau, nunca acabo de quedar claro su contenido.
Yo no participé en este pacto. He escuchado las declaraciones de la alcaldesa con posterioridad, reconociendo que el domingo habrá un referéndum y haciendo una serie de valoraciones. Entiendo que el pacto consistía en eso, en la carta conjunta hecha con el president dirigida al señor Rajoy, etc. La actitud de la señora Colau es de seguir reclamando el derecho al referéndum e invitar a sus votantes a participar el domingo.
En ciudades donde no ha habido pacto con los alcaldes, como por ejemplo L’Hospitalet, ¿habrá colegios abiertos?
Claro que habrá colegios electorales. Solo hay que mirar en esa página que va cambiando pero que siempre se encuentra alguna que funciona. Allí se puede ver. Podemos garantizar que habrá colegios abiertos por todo el territorio, y que todo el mundo tendrá uno cerca de casa. Se votará con total normalidad. Y si alguien rompe esta normalidad, no seremos nosotros.
Hay algunos colectivos que se están organizando para ocupar los colegios desde el viernes por la tarde. Las entidades mayoritarias, en cambio, proponen que es mejor acudir el propio domingo, lo antes posible. ¿A usted la primera idea le parece buena?
El Departament no entra en este tipo de iniciativas, que surgen de las comunidades educativas de cada escuela. He leído noticias de escuelas, comunidades o asociaciones de padres que han montado actividades durante el fin de semana. Me parece perfectamente legítimo. Las escuelas siempre han estado abiertas para las actividades de la ciudadanía. Tenemos un programa de planes de entorno que precisamente promueve poner los centros a disposición de las comunidades, especialmente en horario no lectivo, y no veo ninguna razón por la que no pueda seguir pasando esto.
Pero los Mossos tienen orden de impedir que se abran estos colegios. ¿Deberían incumplirla?
Creo que los Mossos son una policía que está para defender a la gente, para defender el ejercicio de los derechos y que no harán nada que pueda vulnerar derechos básicos del pueblo.
Si finalmente se impide la apertura de centros, ¿votar en la calle es un escenario que el Govern contempla?
Es que yo, perdone que le insista, creo que el referéndum se celebrará con normalidad. Y no se me ocurre como se podrían cerrar todos los colegios teniendo en cuenta el principio de proporcionalidad y de normalidad.
¿Usted es partidaria de una declaración de independencia si la noche del 1-O se constata que no se ha podido hacer el referéndum?
Estamos centrados en otra cosa ahora: votar el día 1 de octubre. Como está previsto en la ley de transitoriedad, que es una ley que está aprobada por el Parlament de Catalunya, si gana el ‘sí’, habrá una declaración de independencia. Y si gana el ‘no’, se convocarán elecciones autonómicas. Este es el guión del Govern y, yo, como consellera, es en lo que tengo puestos todos los esfuerzos. Si se dan otro tipo de circunstancias, tendremos que estudiarlo cuando sucedan, pero aventurar escenarios es inútil.
¿Tiene miedo de las consecuencias judiciales que pueda sufrir usted por su actuación estos días?
Si la gente el domingo sale a votar y llena las urnas no tengo nada que temer. No hemos llegado hasta aquí, siguiendo el mandato de la gente, para tener miedo ahora. Lo único que puede pasar es que la gente nos revoque el domingo quedándose en casa y diciendo que este referéndum no le interesa. Pero ¿alguien cree que puede pasar eso?