Un ataque en la sede de un partido catalán cada cuatro días. Ese es el balance que arroja el registro de denuncias a los Mossos d'Esquadra durante los primeros cuatro meses de 2018, al que este diario ha tenido acceso en exclusiva. 31 “incidentes” -según la calificación usada por los Mossos- en total desde el primer día del año hasta el 30 de abril, de los cuales hasta un tercio fueron denunciados por el PSC. Los datos suministrados por el Departamento de Interior no desglosan los incidentes por tipología.
Los socialistas, con 10 denuncias, ostentan el récord de acciones puestas en conocimiento de la policía, seguidos de Ciudadanos con 8 y ERC, con 6 en total. Los tres son partidos de amplia implantación territorial, aunque algunos de los ataques se han producido varias veces en la misma ciudad. En el caso de los republicanos, han denunciado hasta tres ataques en sedes situadas en Barcelona.
El partido de Inés Arrimadas sufrió dos ataques en Barcelona, L'Hospitalet y Lleida, en diferentes fechas a lo largo de los cuatro meses. El PSC también recibió un ataque doble en la localidad de Vilanova i la Geltrú, el 26 y 27 de marzo. El PP denunció 3 ataques en total, en L'Hospitalet, Sant Cugat y Cerdanyola. La lista la cierran PDeCAT, Podem y CUP, que informaron de un ataque a sus sedes cada uno, en Rubí, Tarragona y Figueres respectivamente.
Territorialmente, la mayor parte de los ataques, hasta 24, se produjo dentro de la Barcelona metropolitana, en la que vive cerca de la mitad de la población catalana. Tampoco se registraron incidentes en municipios pequeños, siendo los menores Sant Sadurní d'Anoia, donde el PSC sufrió un ataque el 25 de marzo, o Vallirana, donde Ciudadanos denunció otro tres días después.
Si se compara por tendencia ideológica de cada partido, las formaciones independentistas denunciaron tres veces menos incidentes que los no independentistas, 8 contra 23. Más igualadas quedan las cosas si se compara entre izquierda y derecha, habiendo recibido los partidos izquierdistas 18 ataques por 13 de los situados en la derecha.
Estos son los primeros datos estadísticos salidos del registro oficial de los Mossos que se conocen sobre el fenómeno de los ataques a las sedes de los partidos. El cuerpo autonómico ha dado acceso a esta información a eldiario.es gracias a una petición oficial registrada con arreglo a la ley de transparencia. Los datos no distinguen la gravedad de los hechos, pudiendo ir de pintadas a destrozos en la fachada o ataques de mayor entidad. El cuerpo rechazó entrar a comentar las cifras.
El PSC reclama “un clima de respeto”
Los socialistas, el partido que ha denunciado más ataques a sus sedes, asegura no querer magnificar el problema. “Son hechos desagradables y es cierto que hemos pasado momentos de tensión, no le quitamos importancia pero tampoco queremos exagerarlo”, asegura el secretario de organización del PSC, Salvador Illa. Desde la formación aseguran que el peor momento se vivió en otoño pasado, y certifican que en este 2018 no han notado un repunte, sino “más bien una relajación de estos hechos”.
Illa asegura que es muy importante que estos ataques se condenen sin matices y por parte de todas las formaciones pero, más importante incluso que esto, es “generar un clima de respeto”. “Hay que adelantarse a que las cosas pasen: crear las condiciones de rechazo a todo tipo de violencia debe ser lo primero en una sociedad plural y tolerante”, considera el secretario de organización.
Fuentes cercanas a ERC explican, por su parte, que el partido tiene como norma de protocolo interno no dar difusión ni comentar los ataques que sufren, con excepciones cuando son hechos graves o de relieve. Estas mismas fuentes explican que el partido reforzó la seguridad durante los meses álgidos del otoño pasado en su sede central de Barcelona, en donde se convocaron algunas manifestaciones. Ahora la situación se ha normalizado, explican.