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Unió acudirá a preconcurso de acreedores ante su grave situación financiera

EFE

Barcelona —

La dirección de Unió Democràtica de Catalunya ha decidido acogerse a un preconcurso de acreedores para resolver su alarmante situación financiera producto de la deuda acumulada y, por ello, sopesa replantear su congreso, convocado para el próximo 16 de abril.

La pérdida de representación parlamentaria en el Parlament catalán y en el Congreso de los Diputados, sumada a la fuga de concejales y militantes desde su ruptura con CDC, ha afectado a las cuentas de Unió hasta el punto de tener que someterse a un preconcurso de acreedores, una figura legal que implica un plazo de negociación de tres meses para tratar de evitar el paso posterior, el concurso de acreedores.

El comité de gobierno del partido se ha reunido este lunes en Barcelona y ha acordado convocar para este sábado un consell nacional en el que se explicará la situación a los cuadros del partido.

Según las mismas fuentes, este procedimiento puede llevar al partido a replantear sus planes más inmediatos: una de las hipótesis que está encima de la mesa es celebrar dos congresos en lugar de un único cónclave.

La dirección democristiana sopesa que haya un primer congreso extraordinario de forma inminente para cambiar los estatutos, con el fin de reducir las estructuras, y dejar para más adelante el segundo, que sería ordinario y estaría dedicado a renovar la dirección y el rumbo ideológico.

Tras el divorcio de Convergència y la escisión de Demòcrates -el sector independentista ahora aliado con los convergentes-, Unió afrontó las pasadas elecciones catalanas en solitario, con su secretario general, Ramon Espadaler, como cabeza de cartel, y se quedó fuera del Parlament, un resultado que se repitió en las generales, con Josep Antoni Duran Lleida al frente de la lista, quien acabó por dimitir como líder de la formación.

En esta etapa de transición, la dirección de Unió, bajo la batuta de Ramon Espadaler, se ha puesto manos a la obra para equilibrar las cuentas: ha reducido personal y está negociando la venta de su sede central, situada en la calle Nàpols, cerca del Parque de la Ciutadella de Barcelona.

Sin embargo, ante una deuda que se enfila hasta cerca de 16 millones de euros, el partido ha decidido acogerse al preconcurso de acreedores para renegociar las cuantías que adeuda principalmente a entidades bancarias.

El preconcurso es un instrumento que facilita la Ley Concursal con el objetivo de que la empresa en cuestión intente alcanzar un acuerdo de refinanciación con sus acreedores y evitar así tener que declarar un concurso de acreedores.

La ley fija un periodo de tres meses para alcanzar un acuerdo y uno más para presentar la solicitud de declaración de concurso ante el juez mercantil si no se ha logrado finalmente alcanzar una solución, lo que equivaldría a una suspensión o una quiebra.