El PP catalán confirma su voluntad de “hablar” con Junts, pero niega que estén negociando

Hablar sí, negociar no. Esta es la fórmula salomónica que se ha sacado de la chistera el PP catalán para encajar el giro de 180 grados que dio este miércoles su partido a nivel nacional, cuando trató de tender puentes con los de Carles Puigdemont en vistas del intento de investidura de Alberto Núñez Feijóo. La iniciativa de Génova generó recelos en la sección catalana del partido, que considera peligroso cualquier acercamiento al independentismo. Por eso, este jueves el secretario general del PP en Catalunya, Santi Rodríguez, ha puntualizado que su partido está dispuesto a “hablar”, pero que no están pactando nada con Junts.

“No estamos pactando, no estamos negociando. Existe la voluntad de hablar”, ha zanjado Rodríguez en los micrófonos de Catalunya Radio. Al mismo tiempo, ha defendido que el equipo de Feijóo abra contactos con todos los grupos para “conocer de primera mano cuál es su parecer respecto a la investidura”, incluyendo a Junts.

Sin embargo, Rodríguez ha puntualizado que, en todo caso, las conversaciones se llevarían a cabo con el grupo parlamentario de los independentistas, y no con Carles Puigdemont, pese a que se sabe que el expresident ha tomado de forma personal las riendas de toda la negociación.

Rodríguez ha tratado de apagar un conato de incendio que comenzó el miércoles en el PP catalán a cuenta de las declaraciones del vicesecretario de Asuntos Institucionales del Partido Popular, Esteban González Pons, que se refirió a Junts como un partido “cuya tradición y legalidad no están en duda”.

Unas pocas horas después, el presidente del PP catalán, Alejandro Fernández, lanzaba un tuit en el que se refería al asunto sin mencionarlo, en términos muy críticos con la dirección nacional de su partido.

No es la primera vez que Fernández se significa como verso suelto respecto al PP de Génova. El pasado mes de mayo, Feijóo aseguró ante el empresariado catalán que su partido había cometido “errores” en Catalunya, unas declaraciones que fueron respondidas por Fernández enmendando el perfil moderado ante el nacionalismo que entonces el candidato a la presidencia del Gobierno trataba de proyectar.

Pese al choque que mantiene el líder del PP catalán con la dirección estatal, este jueves el partido ha salido a contemporizar y a tratar de adaptar el inesperado giro sobre Junts con su estrategia a pequeña escala en Catalunya. Pese a todo, Santi Rodríguez ha admitido que el escenario en el que Feijóo pueda hacerse con la investidura es “poco probable”, algo que también había reconocido el miércoles González Pons.

En la misma línea, el PP catalán considera que por mucho que se abran vías de diálogo con Junts, o incluso con el PNV, quien puede tener la clave para una presidencia de Feijóo son los socialistas. “No estamos buscando tránsfugas”, ha subrayado Rodríguez, sino “apelando a la conciencia del conjunto del PSOE”. “No sé si todos [los socialistas] se sienten cómodos con un candidato que es capaz de poner sobre la mesa una ley de amnistía y la autodeterminación para conseguir unos votos para la presidencia del gobierno”, ha dicho el secretario general.