La gran operación urbanística que el Centro Comercial La Maquinista ha pactado con el Ayuntamiento de Barcelona, que recalificará 92.000 metros cuadrados para uso de la empresa a cambio de que financie la construcción de una escuela pública, contiene “errores técnicos muy graves” que acaban perjudicando al interés público. Es muy difícil determinar si estos errores son conscientes, lo que supondría un delito de prevaricación, o si ha sido un caso de desidia, pero lo que está claro, según el PSC, que ha denunciado públicamente el caso, es que se ha hecho de tal manera que el ayuntamiento deja de ingresar entre 11 y 12 millones de euros. Los socialistas recuerda que es la tercera vez que pasa y exigen responsabilidades políticas.
El asesor de urbanismo del PSC en el Ayuntamiento de Barcelona, David Martínez, ha mirado el proyecto del derecho y del revés y ha encontrado diferentes anomalías pero, sobre todo, dos grandes errores y una ausencia clamorosa. El primer error es que el ayuntamiento calcula que el precio del metro cuadrado de techo edificable en esta parcela será de 450 euros, una cifra desorbitadamente baja. Según la Agencia Tributaria de Catalunya la cifra real se sitúa entre los 1.290 €/m2 y los 1.597 €/m2. Esta reducción del precio tiene un efecto directo sobre la operación, ya que la normativa fija que el 10% del aprovechamiento urbanístico que saque el privado debe ser para el Ayuntamiento. De modo que si los cálculos son a la baja, el dinero que supone ese 10% también será inferior. En cifras, el proyecto tal y como está redactado contempla que con el cambio de calificación, el solar valdrá 60,5 millones de euros, por lo tanto el ayuntamiento se quedará con 6 millones. Pero si el precio del metro cuadrado se cuenta con el valor mínimo que calcula la Agencia Tributaria de Catalunya, que son 1.290 €/m2, el precio total del solar sería de 115 millones, por lo que el ayuntamiento se quedaría entre 11 y 12 millones en vez de 6.
El otro error que ha encontrado en David Martínez es que han contabilizado también el aparcamiento como aprovechamiento urbanístico. Esto es muy extraño ya que los aparcamientos que se construyen bajo los edificios no computan. En teoría, incluir el aparcamiento como aprovechamiento urbanístico debería subir la previsión de beneficios del privado y, por lo tanto, el ayuntamiento saldría beneficiado -con su 10%-, pero por una extraña causa, al final de las cuentas el valor del aparcamiento se resta el total, de modo que, como por obra de magia, el proyecto pasa a ser 38 millones de euros más económico.
Finalmente, David Martínez ha encontrado también una gran ausencia: el documento no dice explicitamente que la escuela la acabará pagando el centro comercial. “Si la operación se hiciera bien, el Ayuntamiento de Barcelona debería salir con 12 millones de euros netos en el cajón y un solar vacío para que la Generalitat construyera una escuela. Y en cambio, lo único que gana son 1,8 millones de euros”. La concejala socialista Imma Moraleda ha recordado que el actual gobierno ya ha cometido errores similares en los proyectos de Can Batlló y la Colonia Castells, de modo que si este error es “porque alguien se equivoca, ya es la tercera vez que se equivoca”. La también concejala del PSC Assumpta Escarp, que había sido concejal de urbanismo, denunció una “clara voluntad de renuncia del interés público, para favorecer a las iniciativas privadas”.
Medio millar de viviendas
El proyecto contempla la recalificación de una parcela propiedad de Unibail Rodamco, dueños de La Maquinista, de 92.000 metros cuadrados, para permitir que los propietarios puedan abrir nuevas tiendas y construir, además, 588 viviendas. Actualmente, la gran mayoría del suelo es industrial, que es uno de los que menos salida tiene. A cambio de esta gran recalificación, según había defendido el Ayuntamiento, el centro comercial se comprometía a construir la escuela pública de La Maquinista, que actualmente está en barracones ya que la Generalitat -que es quien construye los colegios- no tiene intención de empezar la obra. El proyecto está actualmente en exposición pública y en periodo de alegaciones. En la discusión inicial en el Ayuntamiento, sólo CiU votó a favor, mientras que PP, PSC y UxB (ERC) se abstuvieron. Sólo ICV se opuso.
El hecho de que un centro comercial haya de construir las escuelas públicas ya es de por sí discutible y la ampliación del mayor centro comercial de Catalunya también, porque claramente tendrá un impacto negativo sobre el pequeño comercio, pero las nuevas informaciones hacen aún más oscura la gran operación.