La escuela La Maquinista, que actualmente está en barracones, no la construirá ni la Generalitat ni el Ayuntamiento: lo hará el Centro Comercial. A cambio de esta inversión de casi seis millones de euros (esto es lo que vale construir una escuela con IVA incluido), el Ayuntamiento recalificará los 92.000 metros cuadrados que hay delante del Centro Comercial y convertirá unos terrenos industriales en zona comercial y de vivienda.
De esta manera, el Centro Comercial contará con 47.000 metros cuadrados para levantar cinco grandes edificios de 588 pisos y con 45.000 metros cuadrados más para ampliar la oferta comercial. Toda esta operación se hará justo delante de La Maquinista, donde actualmente está el aparcamiento descubierto. El espacio que ocupan actualmente los barracones son del Centro Comercial que los cedió temporalmente hasta que se construyera la escuela en otro lugar. Y es que un parte de esta gran parcela, que limita con las vías del tren, es propiedad municipal y el resto del Centro Comercial, pero los terrenos están muy mal repartidos y era necesaria una reordenación.
Con este acuerdo, el alcalde Xavier Trias desatasca un problema que se arrastraba desde hacía años, ya que permitirá que los alumnos de La Maquinista tengan una escuela de obra en lugar de los módulos prefabricados. Por el contrario, la ciudad sigue privatizándose y pierde unos terrenos industriales que hubieran podido servir para atraer oficinas y generar empleos que ayudaran a dinamizar los polígonos que hay al lado del Centro Comercial. Hay que recordar que, con la crisis, Barcelona ha perdido más puestos de trabajo en el sector industrial que en el de la construcción.
A pesar de la magnitud de esta gran operación, el proyecto se ha negociado sin hacer mucho ruido. Para que salga adelante, aunque hay un período de exposición pública, presentar las enmiendas que vecinos y partidos consideren y volverlo a discutir. De momento, a la Comisión de Hábitat Urbano que se ha celebrado en el Ayuntamiento, todos los partidos se han abstenido a la propuesta del Gobierno, salvo ICV-EUiA, que ha votado en contra.
“Estamos a favor de que se construya la escuela, pero si no la puede pagar la Generalitat lo puede hacer el Ayuntamiento, que prevé cerrar el año con 123 millones de euros de superávit”, ha apuntado Janet Sanz, la concejala de ICV-EUiA. Según Sanz, la posición del Gobierno “es un chantaje a la ciudadanía, ya que dice: si quieres la escuela, debes pagarlo por otro lado. Yo entiendo a las familias del AMPA que quieren que se construya la escuela, pero no vale todo. Si la prioridad es la escuela se puede hacer porque hay dinero, de hecho, cuesta menos que la remodelación del Paseo de Gracia”.
Cinco torres del estilo Diagonal Mar
Cinco torres del estilo Diagonal MarSanz critica que detrás del proyecto hay una “operación especulativa porque los terrenos comerciales y de vivienda son mucho más valiosos que los de suelo industrial”. Aún así, esta parcela se hubiera podido convertir en una especie de “22 @ que atrajera economía verde, espacios de tecnología, etc”. El proyecto también perjudicará “el tejido comercial del barrio”, según Sanz a parte del impacto visual que provocarán las “cinco torres del estilo Diagonal Mar”. El proyecto prevé cuatro grandes edificios de 20 pisos un quinto de 24 pisos de altura.
Según ICV, el gran beneficiado del acuerdo es el Centro Comercial La Maquinista, que ganará mucho dinero con la venta de los pisos y al mismo tiempo atraerá nuevos compradores a sus tiendas. De hecho, según sostienen, el plan que presenta CiU es directamente la propuesta del promotor.
Otro punto que también ha sido criticado en la comisión es que de toda la promoción sólo se reservarán un 30% a la protección social , muy por debajo del 50% que preveía el Plan de Vivienda que se aprobó durante el mandato anterior .
La presidenta de la Asociación de Vecinos del Buen Pastor, Paquita Delgado, también se opone “totalmente” a esta gran operación, después, eso sí, de reclamar que la escuela “se haga sí o sí”. La portavoz vecinal lamenta que se pierda terreno industrial: “Esta zona está al lado de la futura estación del AVE donde se tenían que construir oficinas, lo que hubiera potenciado los polígonos y generado nuevos puestos de trabajo”. Según Delgado, los casi 600 pisos densificar aún más la zona y complicarán el tráfico. Desde la Associació de Veïns de Sant Andreu prefieren esperarse a ver el proyecto para presentar las alegaciones.