El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido este lunes desde Barcelona, y frente al president de la Generalitat, Pere Aragonès, la necesidad de dejar atrás las “posturas maximalistas” y “los intereses partidistas” para recuperar la convivencia en Catalunya. En un discurso en la sede de la patronal Foment del Treball, que ha concluido con un alegato en favor del “reencuentro”, el presidente del Ejecutivo ha proclamado que “no habrá mayor beneficio para la ciudadanía catalana y española que dejar atrás el escenario de conflicto”.
A las pocas horas de que Oriol Junqueras publicase un artículo en el que apoya públicamente el indulto para los presos del procés y renuncia a la vía unilateral, Sánchez ha vuelto a remarcar su intención de avanzar en la distensión de la situación política en Catalunya, recurriendo incluso a términos que ya había usado, como el de revancha. “No busquemos justificaciones o revanchas, sino soluciones: con pragmatismo, honestidad y con sentido común”, ha expresado. “Dejemos a un lado esa dialéctica estéril de los unos y los otros y busquemos juntos un nuevo nosotros. Cambiemos las amenazas por propuestas, vengan de donde vengan”, afirmaba justo antes.
Pedro Sánchez y Pere Aragonès coincidían por primera vez en un acto después de la investidura del nuevo president de la Generalitat. Ambos se han congratulado por ello durante sus respectivas intervenciones. Hasta ahora, solo habían mantenido la conversación telefónica de la semana pasada, en la que abordadon cuestiones como la lucha contra el coronavirus y el reparto de los fondos europeos, pero que sirvió sobre todo para emplazarse a una reunión cara a cara este mismo mes de junio.
Ante la voluntad de ambos ejecutivos de iniciar un proceso de normalización de relaciones y recuperación del diálogo, Sánchez se ha comprometido al final de su intervención a “dar pasos que permitan avanzar”: con “decisión”, “serenidad” y “enorme sentido de la justicia”. “Nos jugamos el futuro. El reencuentro solo se alcanzará con argumentos, sin duda también con emociones, pero sobre todo con razones”, ha aseverado.
“El Gobierno ha dado pasos hacia adelante”
En parecido tono conciliador ha intervenido justo antes Pere Aragonès, que ha defendido también frente al auditorio y a Sánchez abrir una etapa de diálogo entre instituciones. En más de una ocasión se ha referido a la necesidad de escuchar todas las propuestas para solucionar el conflicto catalán, más allá de las que defiende su Ejecutivo, que pasan por la amnistía de los encarcelados y la autodeterminación. “El Gobierno de España tendrá las suyas y hay que escucharlas todas y respetarlas para abrir una etapa”, ha expresado.
“Quiero reconocer que se han hecho pasos hacia adelante”, ha concedido Aragonès, al dar por hecho que con el planteamiento de los indultos el Ejecutivo central reconoce la necesidad de “abordar el conflicto”. “No será fácil, será extraordinariamente difícil, pero es nuestra obligación por el bien de los ciudadanos de Catalunya”, ha resaltado el president.
El acto de este lunes, organizado por la patronal Foment del Treball en motivo de su 250 aniversario, ha consistido en la condecoración de Javier Godó, propietario y editor del Grupo Godó, por su trayectoria empresarial. Además de Pedro Sánchez y Pere Aragonès, han acudido al evento el teniente de alcaldía del Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni, la presidenta de la Diputación de Barcelona, Núria Marín, y distintos empresarios de la ciudad.
Además de esta visita a Catalunya, Sánchez tiene programada al menos otra, el 18 de junio, para una conferencia del Cercle d’Economia. La mayor presencia del presidente del Ejecutivo en Barcelona se interpreta como uno de los gestos de distensión para normalizar las relaciones con los representantes institucionales catalanes, y que tendrán un punto de inflexión si llegan los indultos a los presos del procés antes del verano.
El aval de Junqueras a los indultos
Sobre la medida de gracia se ha pronunciado precisamente este lunes el líder de ERC, Oriol Junqueras, que ha mostrado públicamente su apoyo a su concesión. “Hay gestos que pueden aliviar el conflicto, paliar el dolor de la represión y el sufrimiento de la sociedad catalana, y cualquier gesto en la línea de la desjudicialización del conflicto ayuda a poder recorrer este camino”, ha expresado en un artículo.
Junqueras asegura que las dos partes del conflicto deben mostrar “voluntad y predisposición” y sostiene que le toca al Gobierno central demostrar “su compromiso con la reconciliación”. “Nosotros hace tiempo que, a pesar de estar en la cárcel privados de libertad, nos sentamos a la mesa y mantenemos siempre la mano tendida”, ha argumentado.