Dos extesoreros, dos estrategias distintas. El exresponsable de finanzas de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) Andreu Viloca no ha secundado a su antecesor, Daniel Osàcar, y ha evitado tirar de la manta sobre el blanqueo de comisiones de empresarios a obra pública mediante donaciones que habría realizado el partido. Según fuentes presentes en la declaración, Viloca ha asegurado que no le consta “nada” sobre el presunto blanqueo y que en cualquier caso no se produjo en su etapa como tesorero, entre 2011 y 2016.
Viloca ha declarado durante una hora este lunes como imputado ante el titular del juzgado de instrucción 5 de la Audiencia Nacional, José de la Mata, que investiga el blanqueo de capitales del partido y antes del verano ya procesó al extesorero y a Osàcar por la pieza principal del caso del 3%, que juzgará las comisiones de empresarios al partido a cambio de obra pública.
En la pieza separada sobre blanqueo del caso del 3%, el juez investiga si los exresponsables y expolíticos de CDC afloraron dinero procedente de las comisiones ilegales mediante un sistema de 'pitufeo', es decir, donaciones en efectivo con apariencia altruista que los políticos hacían para cuadrar las cuentas pero que en realidad servían para blanquear las mordidas de empresarios a cambio de obra pública.
En el marco de sus negociaciones con la Fiscalía Anticorrupción, el antecesor de Viloca, Daniel Osàcar, ha tirado de la manta y ha admitido que existió un sistema de blanqueo de capitales en las finanzas del partido, si bien no lo ha llegado a vincular con las comisiones de empresarios, tal y como sospechan el juez y el fiscal.
Osàcar, que pasó dos meses en la cárcel por el caso Palau y evitó que la Fiscalía recurriera su tercer grado encendiendo el ventilador en el caso del 3%, señaló además como responsable del lavado de dinero al exgerente y exconseller Germà Gordó, que declarará el viernes, y dijo que Artur Mas tenía que conocer el sistema de blanqueo, algo que el expresident negó.
Viloca ha sido la otra cara de la moneda de Osàcar: el extesorero ha negado siquiera conocer el sistema de blanqueo, habida cuenta de que, según los propios investigadores, se produjo entre 2008 y 2010, fechas en las que las finanzas del partido estaban en manos de Osàcar, ha recordado Viloca. “Desconocía lo que pasaba antes de 2011”, ha expresado Viloca, según las mismas fuentes. Ha sido la primera vez en toda la causa que Viloca no se ha acogido a su derecho a no declarar.
Pese a que la declaración de Viloca no ha puesto mucha luz sobre el presunto sistema de blanqueo, a la espera de lo que pueda decir Gordó –está citado para el viernes aunque su defensa ha pedido cambiar la fecha– el extesorero sí ha desmentido uno de las tesis principales de Artur Mas sobre el caso, esta es, que la parte económica y política del partido no tenían nada que ver –una forma de los exdirigentes de Convergència de responsabilizar a los tesoreros de la corrupción del partido.
Así, Viloca ha explicado que en Convergència había una relación “muy jerárquica” entre la tesorería, la gerencia y la dirección política, y que en su etapa despachaba muy a menudo con el entonces secretario general adjunto, Oriol Pujol Ferrusola, y el gerente Carlos del Pozo (también procesado en la pieza principal del 3% y que sucedió a Gordó después de que lo nombraran secretario del Govern de Mas en 2010).