Los Mossos inmovilizaron el pasado martes un total de 1.681 litros de un producto de limpieza que se iba a vender en las tiendas como gel hidroalcohólico higienizante para manos contra el coronavirus. Lo comercializaba una empresa de Rubí (Barcelona) y las botellas de un litro y garrafas de cinco del producto presentaban un etiquetado falso y contradictorio.
Tanto el nombre como la ilustración contenida en el envase conducían a pensar que se trataba de un producto para la higiene de las manos. Pero, al mismo tiempo y en otro apartado del recipiente en letra mucho más pequeña, se especificaba que había que utilizar el producto con guantes y que había que evitar el contacto del gel con la piel.
Una denuncia de un ciudadano el 23 de marzo alertó a los agentes de la comisaría de Terrassa que se estaba comercializando en un establecimiento de la ciudad un gel hidroalcohólico que presentaba un etiquetado contradictorio. Los agentes pusieron los hechos en conocimiento de la Unidad Central de Consumo de la División de Investigación Criminal, que inició la correspondiente investigación de forma coordinada con el Servicio de Control Farmacéutico y Productos Sanitarios del departamento de Salud.
Los agentes verificaron que en la página web de la empresa comercializadora se publicaba el producto como gel de manos contra el coronavirus y, por tanto, con la atribución de propiedades de carácter biocida. Paralelamente, el departamento de Salud determinó que el producto no estaba autorizado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) como biocida y que la empresa distribuidora no podía fabricar productos cosméticos, ya que no había llevado a cabo los trámites para poder hacerlo.
El mismo lunes 23 de marzo el departamento de Salud envió un requerimiento a la empresa para que detuviera la fabricación y comercialización del producto. Ante la falta de respuesta, al día siguiente los agentes de la División de Investigación Criminal se desplazaron hasta las instalaciones de la empresa, donde se les notificó el requerimiento y se detuvo la fabricación del producto, además de inmovilizar todo el stock que había en el almacén.
La comercialización de este género se produce en un contexto de escasez de geles hidroalcohólicos motivada por la pandemia del Covidien-19, lo que ha posibilitado que este producto ilegal haya tenido una gran salida comercial. Los hechos han sido denunciados ante el juzgado de guardia de Rubí como presuntos delitos de publicidad engañosa y estafa al consumidor, sin prejuicio del procedimiento administrativo sancionador que pueda incoar el departamento de Salud por comercializar el producto sin las debidas autorizaciones.