El subinspector del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO) de los Mossos d'Esquadra, Jordi Arasa, ha declarado como investigado (que equivale a la antigua denominación de imputado) este jueves por el desalojo del movimiento 15-M de la plaza Catalunya el 27 de mayo de 2011. Lo ha hecho gracias a la querella del grupo Som 27-M, que agrupa a 57 personas agredidas el día del desalojo.
En la declaración de este jueves, Arasa ha visionado 8 vídeos y varias fotografías. El Mosso d'Esquadra sólo se ha reconocido en las imágenes donde aparecía de pie y sin actuar; no en las que los mossos golpeaban a los concentrados que estaban sentados de forma pacífica en el suelo de la plaza Catalunya.
Esta declaración ante la jueza que investiga el caso supone un cambio de estrategia de Arasa en su defensa y viene motivada por la condena que le impuso la Audiencia de Barcelona por agredir a David Fernàndez (que aún no era diputado de la CUP en el momento de los hechos). Así, si durante el proceso judicial de Fernàndez sí se reconoció en las imágenes donde los agentes golpean los activistas de la plaza Catalunya, este jueves no se ha reconocido.
Según han informado fuentes jurídicas, Arasa ha declarado que utilizó la fuerza “innumerables veces” ya que la actitud de las personas que estaban sentados en el suelo no era pacífica, sino violenta. Las partes han pedido a Arasa que definiese a qué se refería cuando hablaba de actitud violenta de los manifestantes. El subinspector policial ha mencionado el hecho de que los manifestantes siguieran sentados en el suelo ejerciendo la desobediencia pacífica y se negaran a obedecer las órdenes de la policía, que los conminó a abandonar la plaza Catalunya.
Por otra parte, según las mismas fuentes, el investigado ha declarado que había “mucha pintura roja” cuando se le ha preguntado por qué algunos de los agredidos en la plaza Catalunya tenían lesiones en la cabeza si, según la versión de Arasa, los mossos sólo habían propinado golpes de porra en las tibias de los concentrados.
Arasa es conocido entre los movimientos sociales de Barcelona por su contundente actuación en actos de protesta. Tal y como desveló La Directa, el caso del desalojo de plaza Catalunya el 27 de mayo se ha reabierto gracias a que la magistrada encargó un informe pericial fisionómico para determinar quién era el jefe de la policía que se encontraba en la primera línea de las cargas contra los activistas.