El Delta del Ebro se encuentra en estado de emergencia debido al temporal Gloria. Las lluvias y el viento han provocado que el mar haya penetrado varios kilómetros tierra adentro y se han anegado, según los primeros cálculos, unas 3.000 hectáreas de arrozales. El satélite Sentinel 1 del programa Copernicus de la Agencia Espacial Europea (ESA) ha difundido unas imágenes en las que se ve el Delta antes y después del aguacero. En el segundo caso aparece cubierto de agua en su práctica totalidad.
Al tiempo que los alcaldes de la zona piden declarar el Delta zona catastrófica, las dos imágenes del satélite Sentinel 1, de los días 15 y 21 de enero, han corrido rápidamente por las redes sociales. Sin embargo, los expertos consultados piden cautela y esperar a que haya bajado el nivel del mar y pasado el temporal para evaluar el impacto real sobre su ecosistema y el posible retroceso de la línea costera.
“Hay que tener en cuenta que la imagen del radar no permite distinguir entre agua de lluvia y agua de mar”, precisa Miguel Ángel Vargas, geógrafo y director del Laboratorio de Información Geográfica y Teledetección de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB). “Seguramente mucha agua de mar ha entrado hacia adentro, pero principalmente en delta está anegado por la lluvia”, aclara.
El hecho de que en la imagen del día 21 de enero, en pleno temporal, se aprecie todavía –aunque difuminada– la Playa del Trabucador, la delgada línea de tierra que conecta el grueso del Delta con la Península de la Baña ubicada en su extremo meridional, hace pensar que el nivel del agua puede ser más superficial de lo que parece.
Según los cálculos del Ayuntamiento de Deltebre el mar ha penetrado unos tres kilómetros hacia adentro. La Comunidad de Regantes de la Izquierda del Ebro estima que se han anegado unas 3.000 hectáreas de campos de arroz, que en esta época están sin cultivar y que precisamente se riegan por inundación. En este sentido, la imagen satelital de estos días podría no ser demasiado distinta a la que presenta el Delta en temporada de riego, pero con la diferencia de que ahora el agua dulce se mezcla con la salada, y esta última daña el arroz.
Albert Rovira, geomorfólogo fluvial, también remarca que habrá que esperar a que baje el nivel del mar. “Así podremos valorar qué parte de costa se ha perdido y si se puede recuperar. A día de hoy todavía no lo podemos saber, aunque todo hace pensar que los efectos van a ser muy duros”, valora. Fenómenos de este tipo contribuyen a la recesión del Delta, puesto que si su principal problema es la falta endémica de sedimento, estos aguaceros “aceleran la pérdida de terreno”, constata.
En el margen izquierdo del Delta del Ebro, la entrada del mar ha afectado a las playas del Fangar y Riumar. Asimismo, ha cubierto prácticamente toda la Isla de Buda. En unas imágenes aéreas difundidas por los Mossos d'Esquadra se observa la parte interior de la playa del Fangar, alrededor del faro, está anegada.
El Gobierno reconoce que ha superado “el peor de los escenarios”
El secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, ha admitido este miércoles que la inundación del Delta del Ebro ha superado “el peor de los escenarios” que manejaba el Gobierno en caso de catástrofe en esta región. “Este fenómeno ha superado las previsiones que se mantenían en el peor de los escenarios que manejábamos”, ha asegurado en una rueda de prensa junto a la delegada del Ejecutivo en Catalunya, Teresa Cunillera, tras la reunión del Comité Técnico de Seguimiento para valorar los efectos de Gloria.
Morán ha detallado que el Gobierno elaboró a finales de 2018 un informe con posibles intervenciones para cinco escenarios con distintos grados de afectación, pero la inundación este martes del Delta del Ebro, que el mar ha engullido con fuerza, ha invalidado todas ellas. Preguntado sobre la posibilidad de decretar el área como zona catastrófica, tal como han solicitado varios ayuntamientos de la zona, Morán ha recordado que dicha medida ya no existe como tal “en términos normativos”.
El president de la Generalitat, Quim Torra, se ha desplazado por su parte a l'Ampolla, Deltebre y el litoral del núcleo de Riumar y ha avanzado que la Generalitat trabajará conjuntamente con la Mesa de Consenso del Delta, que agrupa alcaldes, comunidades de regantes y agentes implicados del territorio, para impulsar un plan de acción que aporte soluciones.
“El Delta necesita una solución ahora y aquí y en este sentido reafirmo el compromiso que he dado a los alcaldes, que ya es hora de pasar a la acción. Aprovecharemos el marco de la Mesa de Consenso para impulsar un plan de acción que consensuaremos en los próximos días, y que tendremos que calendarizar, presupuestar y exigirnos en su cumplimiento”, ha asegurado Torra.