El tribunal acuerda que la víctima de la violación de Igualada no declare en el juicio

La Audiencia de Barcelona ha acordado que la víctima de la violación de Igualada no comparezca en el juicio que arrancará el próximo lunes y que su testimonio sea valorado mediante la exhibición de su declaración en fase de instrucción con el objetivo de evitar un “perjuicio” y la revictimización de la joven.

En una providencia, la sección 10ª de la Audiencia de Barcelona, que en un principio había acordado la declaración de la joven –menor de edad en 2021, cuando sucedieron los hechos–, ha estimado un recurso de la Fiscalía y ha decidido que la víctima no tenga que comparecer en la vista oral, que se alargará toda la próxima semana.

La sustitución de la comparecencia presencial de la víctima por la reproducción del vídeo de su declaración en fase de instrucción como prueba preconstituida busca, según explican los jueces, evitar un “mayor perjuicio” a la joven y que se agraven sus problemas psicológicas por tener que rememorar el trauma de la violación en el juicio.

Además, su testimonio “poco o nada pueda añadir” debido al estado de inconsciencia en el que se encontraba tras la violación y a su “escaso recuerdo”, añade el tribunal, que ya cuenta con informes periciales para determinar las consecuencias físicas y psicológicas que los hechos tuvieron para la joven.

La Audiencia de Barcelona ya acordó prohibir la “divulgación o publicación” de información relativa a la identidad de la víctima y de cualquier dato que pueda facilitar su identificación, así como de las circunstancias personales que “hubieran sido valoradas para resolver sus necesidades de protección”. También estará vetada la divulgación o publicación de imágenes de la víctima o de sus familiares.

La Fiscalía pide 45 años de cárcel y casi 260.000 euros en indemnizaciones para el acusado de la violación, ocurrida la madrugada del 1 de noviembre de 2021, cuando salía de una discoteca en Igualada (Barcelona). El Ministerio Público atribuye al acusado, Brian R.C., los delitos de asesinato en grado de tentativa y agresión sexual y pide que se le impongan otros diez años de libertad vigilada cuando salga de prisión.

La violación ocurrió la noche de Halloween de 2021, cuando la menor, que ingresó en la UCI en estado crítico a raíz de la agresión, se dirigía sola y a pie hacia la estación de tren para ir a su casa, en Vilanova i la Geltrú (Barcelona), tras estar de fiesta con unas amigas en la discoteca Epic de Igualada.