Cospedal sigue reclutando para Defensa a ex altos cargos de Castilla-La Mancha
Además del acomodo que muchos de los exconsejeros encontraron en otras áreas ejecutivas Gobierno de Mariano Rajoy, la ex presidenta de Castilla-La Mancha María Dolores de Cospedal ha reclutado para el Ministerio de Defensa a otro de los altos cargos de su antiguo gobierno. En ese caso se trata de Eliseo Gómez Velasco, funcionario del Cuerpo Superior de Castilla-La Mancha, que ha sido nombrado como Subsecretario de Régimen Interior.
Fue secretario general de Hacienda en la comunidad autónoma y al igual que otros ex altos cargos de la también secretaria general del PP, fue objeto de polémica, en su caso, por ejecutar la reforma del Plan de Recursos Humanos del parque móvil de conductores de la Junta, con el despido de varios de ellos y el objetivo de privatización de este servicio.
Según informaron entonces los sindicatos, el Gobierno regional llegó a abrir expediente disciplinario a dos de estos trabajadores por denunciar su situación, buscando de esta manera su “criminalización”. De hecho, Gómez Velasco se convirtió en centro de las críticas sindicales tras esta medida: STAS-Intersindical, sindicato de trabajadores de Administración y Servicios, le acusó de manifestar que los conductores de la Junta “no prestan un servicio público” y que sus funciones las podía desempeñar una empresa privada.
De cualquier forma, y tras varios procesos judiciales, huelgas, encierros, concentraciones y manifestaciones, ese Plan de Recursos Humanos se frenó después de la salida de Cospedal del Gobierno castellano-manchego en julio de 2015. Antes, ya había sido paralizado de forma cautelar por los tribunales a la espera de una sentencia definitiva del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, que nunca se produjo una vez suspendido el proyecto por parte del nuevo gobierno.
Gómez Velasco pasa a formar parte del Ministerio de Defensa, junto a otras dos personas del entorno cercano a Cospedal. En este departamento también se encuentra el exdiputado Agustín Conde, actual secretario de Estado de Defensa. La ministra lo eligió después de que hubiera fichado por Red Eléctrica de España tras haber perdido su escaño por la provincia de Toledo; y posteriormente hizo lo propio con Arturo Romaní, actual subsecretario de Defensa y ex consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha. Antes de fichar por este Ministerio, Romaní regresó a la Agencia Tributaria donde trabajó como enlace con Francia.
Y fuera de las áreas de competencias de Cospedal, otros ex consejeros de su Gobierno se hicieron con altas posiciones en el Ejecutivo central. Es el caso del secretario de Estado de Educación, Marcial Marín, que fue consejero de este área en la comunidad autónoma durante su etapa de mayores recortes; o de María Luisa Soriano, ex consejera de Agricultura que es presidenta del Liceo ‘Cervantes’ de Roma, dependiente de la Embajada de España en Italia y del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte.
Otra figura controvertida del Ejecutivo de Cospedal fue la de Leandro Esteban. Ex consejero de Presidencia, Administraciones Públicas y ex portavoz del Gobierno regional, mantuvo un encendido enfrentamiento con los empleados públicos de la Junta que acabó en varios procedimientos judiciales. Actualmente forma parte de la Fundación de las Cámaras de Comercio. Al gabinete de este último pertenecía Mar España. Fue viceconsejera de Presidencia y Administraciones públicas y ahora es directora de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) de cuyo Consejo Consultivo ya era vocal con anterioridad.
Otro peso fuerte en el anterior Gobierno de Castilla-La Mancha fue la anterior consejera de Empleo y Economía, Carmen Casero. Ahora es directora general del Trabajo Autónomo de la Economía Social y de la Responsabilidad Social de las empresas, dependiente del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
Las recolocaciones también beneficiaron a la ex consejera de Fomento, Marta García de la Calzada, que obtuvo destino en la Abogacía del Estado del Tribunal Supremo, donde también es vocal su marido, Gerardo Martínez Tristán. De hecho, hasta 2011 era vicepresidenta del Tribunal de Defensa de la Competencia de la Comunidad de Madrid, que presidía Esperanza Aguirre.